Medio centenar de aficionados han seguido esta tarde el partido entre Marruecos y España de octavos de final del Mundial de Qatar en un bar de Sevilla donde los goles, que se hicieron esperar hasta la tanda de penaltis, han coincidido con la degustación gratis de platos de cuscús marroquí o tortilla española.
Una iniciativa del bar El marisquero, ubicado en la calle Arroyo de la capital andaluza, donde sus responsables y clientes han tenido que esperar a los lanzamientos de penaltis para sacar los primeros platos a la mesa, tras el gol transformado por el marroquí Sabiri.
José Antonio Gil, el gerente del local, planteó que, por encima del resultado, "había que pensar en una idea para unir a las aficiones de dos países vecinos", y se pensó en hacerlo a través de la gastronomía.
Para Gil, el resultado en estos casos, "aunque duela que haya perdido España", debería ser lo de menos, teniendo en cuenta que "el deporte debe estar para unir, y si es a través de algo tan sencillo como la gastronomía, mucho mejor".