La reforma de la ley del solo sí es sí registrada por el PSOE ha comenzado este martes su tramitación parlamentaria apoyada por los votos de los diputados socialistas y del PP y con la oposición de Unidas Podemos y parte del bloque de la investidura.
Horas después de un duro debate en el que los socios de gobierno se han lanzado duras críticas, el pleno del Congreso ha tomado en consideración la proposición de ley que sube las penas de las agresiones sexuales cuando haya violencia o intimidación con 231 votos a favor, 56 en contra y 58 abstenciones.
Junto al PSOE y al PP han votado sí los parlamentarios de Ciudadanos, el PNV, el PDeCat, Coalición Canaria y PRC, además de otros diputados del grupo mixto.
En el no se han situado, además de Unidas Podemos, ERC, EH Bildu, BNG y la CUP. Vox ha optado por la abstención, al igual que formaciones como Más País, Compromís y JxCat.
El jefe del Ejecutivo no ha acudido este martes al pleno y los ministros presentes en la bancada azul del gobierno ha evidenciado el voto dividido, con el las ministras de Hacienda, María Jesús Montero, y de Justicia, Pilar Llop, cuyo departamento diseñó la reforma, en la lado del sí; y el no de la vicepresidenta Yolanda Díaz y la ministra de Igualdad, Irene Montero.
Justo antes de la votación, Díaz e Irene Montero se han reunido fuera del hemiciclo, junto al secretario general del PCE, Enrique Santiago, entre un revuelo de fotógrafos y cámaras de televisión.