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Lunes 29/04/2024  

Sevilla

Muñoz y Sanz contraponen su visión (casi) irreconciliable de la ciudad

Antonio Muñoz (PSOE) y José Luis Sanz (PP) evidencian en el cara a cara sus diferencias, con varios momentos tensos, incluido el recurrir a ETA

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  • Muñoz y Sanz se saludan antes del cara a cara. -

De la Sevilla lanzada frente a proyectos frívolos a la Sevilla virtual de un mundo paralelo a la que le falta gestión y coordinación. En esos dos escenarios se han movido el alcalde de Sevilla y candidato por el PSOE a la reelección, Antonio Muñoz, y el alcaldable del PP, José Luis Sanz, en el cara a cara que han protagonizado en Radio Sevilla (SER) y que ha evidenciado una visión de la ciudad casi irreconciliable pero en la que han coincidido en muchos aspectos, especialmente en la radiografía de los problemas de la capital y en algunas de sus soluciones.

El debate, de más de una hora de duración, ha sido ágil y dinámico, con continuas interrupciones entre ambos candidatos y con varios momentos tensos, especialmente cuando Sanz le recriminaba a Muñoz su “silencio cómplice” con el Gobierno de Pedro Sánchez a la ley del sólo sí es sí o a que Bildu haya incluido etarras condenados en sus listas. “Es indignante, repudio que haya terroristas en las listas pero muy mal tiene que ver las cosas para recurrir al argumento de ETA”, le espetaba entre interrupciones Muñoz mientras Sanz le respondía afirmando que “no me arrepiento de mi partido ni de mi presidente”, a lo que el socialista le contestaba: “Yo reivindico y llego a acuerdos, usted sólo reivindica al Gobierno central”.

Fue quizás el momento más tenso de un cara a cara en el que mientras Muñoz intentaba defender que tras la pandemia la ciudad “ha recuperado el pulso” y “antes de tiempo” aprovechando las convocatorias de Junta, Gobierno y Europa, porque “eso es gestión”, Sanz insistía en la pérdida de 7 millones de fondos europeos, la parálisis urbanística, que los servicios públicos no funcionan, la degradación de los barrios y que en limpieza ponen a un gerente “que no sabe gestionar”, a lo que Muñoz le replicaba con los 300 millones de euros que se han captado, la Agencia Espacial, las inversiones de empresas y en el ámbito industrial, el desbloqueo de numerosos proyectos (Altadis, Gavidia, Fábrica de Vidrio, Palmas Altas…) y el popular le cortaba adjudicándoselo, aún sin ser así, al presidente de la Junta, Juanma Moreno.

 

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Muñoz se indignaba. “¿Por qué no se alegra de la Agencia Espacial? Usted y Teruel Existe son los únicos que no se han alegrado”. Y no es la única vez que le recriminaba a Sanz su “visión apocalíptica que no se corresponde con los datos” al hablar de empleo, de vivienda, la SE40, el Metro, la conexión aeropuerto-Santa Justa, el tranvía… “Le doy la enhorabuena por los desbloqueos de los últimos tres meses”, le respondía el popular, atribuyendo a Juanma Moreno e incluso hasta a la alcaldesa Soledad Becerril (por Melonares), algunos de esos proyectos, volviendo a insistir en la “Sevilla virtual” que no se corresponde con barrios, polígonos industriales o la propia Cartuja. “Vaya a Contadores a explicárselo”, le espetaba mientras Muñoz consideraba “curioso” que se saltase la época de Juan Ignacio Zoido, etapa de inmovilismo que le atribuyó si vuelve el PP a la Alcaldía.

En los barrios, la necesidad de reducir las desigualdades y los problemas de movilidad sí que fueron ambos coincidentes. Mientras Muñoz los ponía como centro de su acción futura, Sanz aprovechaba para criticarle que hubiera faltado “coordinación en las inversiones” y que fuera “incapaz de presentar proyectos a tiempo”. Muñoz sacó pecho de los proyectos de rehabilitación de Los Pajaritos con todas las administraciones pero reconoció que no era el ritmo adecuado tres años para cada convocatoria: “No podemos estar al albur de las convocatorias”. Para Sanz, estos ochos años han sido un “kitkat” en el que se han entregado cero viviendas, ocho ascensores y no funcionan los servicios sociales, algo que Muñoz justificaba, no sólo en los retrasos de la pandemia, sino en la falta de una ley autonómica que traspase las competencias a los ayuntamientos.

 

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El debate derivó en los toldos de la Avenida de la Constitución que Sanz anunció junto a Juanma Moreno cuando el proyecto llevaba un año y medio en la Comisión de Patrimonio. “Su número dos (por Minerva Salas, delegada territorial de Turismo y Cultura en funciones) nos tiene paralizados 30 millones en inversiones”, decía Muñoz recordando los toldos, la casa Cernuda, Lope de Vega… A lo que Sanz explicaba que “los proyectos están mal redactados y rematados” e incluso llegó a decir, con la modificación del PGOU para limitar los pisos turísticos que tiene recurrida la Junta, que “seguramente usted lo hace todo sin negociar”. “Le reconozco que con Carazo y Del Pozo la relación era muy fluida”, se lamentaba Muñoz, que además criticaba que Sanz “falte al respeto” a los técnicos o a los profesionales de los servicios públicos en su visión “en blanco y negro” de la ciudad.

Turismo, limpieza y el error con Torneo

El turismo fue otro ejemplo del choque entre ambos, a pesar de que hay bastante consenso en sus propuestas. Sanz le cuestionaba la invasión de los pisos turísticos y las 45.000 plazas aprobadas, Muñoz le respondía que eran competencia de la Junta y que esperaban como “agua de mayo” el decreto para limitarlos en zonas tensionadas, el popular pedía un turismo de calidad y el socialista le contestaba con los “hoteles de cuatro y cinco estrellas nuevos”, el primero le pedía no ver sólo el futuro en la “alfombra roja de los Goya” e invertir en Fibes y abrir el campo a otras industrias, y el segundo le contestaba, además de con los datos de turismo, con la agenda de congresos de sectores empresariales, las plataformas digitales, las incubadoras para jóvenes y emprendedores, las inversiones en renovables, el Puerto, Cartuja y su “papel mediador” en Abengoa. “Dígaselo a los vecinos de Contadores”, replicaba Sanz.

En limpieza, se volvieron a escenificar posturas más que conocidas entre ambos aunque sí que hubo un compromiso por parte de los dos: ampliar la plantilla. Muñoz cifró en 250 el déficit de personal, además de prometer seguir invirtiendo y actuar frente a los pisos turísticos, y Sanz, además de la plantilla y maquinaria, un plan de choque y “poner un buen gerente profesional”.

Sobre movilidad, coincidieron también en los grandes proyectos, tan necesarios, pero no en el análisis. Sanz le espetó la “parálisis” del puente de la SE-40, la “ratonera” por la falta de planificación de obras o haber sido “sumiso” con los gobiernos del PSOE con el Metro, cuestionando el tranvibús de Sevilla Este, a lo que Muñoz le contestaba con un contundente: “Sevilla está en marcha y las transformaciones siempre conllevan molestias”, cuestionando esa oficina de coordinación “para nada porque cuando gobierna el PP no invierten” anunciada por el popular y defendía el tranvibús porque los vecinos “no van a esperar 5 ó 6 años” a que se inicien las obras de la Línea 2, que ambos coincidieron en pedir que se haga en paralelo al tramo sur de la 3.

En medio del debate sobre los proyectos sobre la Sevilla verde, que ambos dicen querer, Muñoz afeó a Sanz que realizara propuestas “frívolas” como la de soterrar el Paseo Colón o crear un museo en la Universidad “sin contar con el rector”, contraponiendo sus “prioridades” con actuaciones en los barrios, entre las que citó la del Paseo de Torneo. Sanz erró y le interrumpió: “Lo ha hecho la Junta”. “¿Perdón?”, le contestaba airado Muñoz para reivindicar los seis millones invertidos y lamentar que “se nota que no ha vivido” en Sevilla.

Sobre la Ley de Capitalidad, volvieron a enfrentarse pero porque cuando la reclamó Muñoz y Moreno aceptó estudiarla, Sanz dijo que “no era el momento”, asintiendo el popular que añadía “porque eran elecciones” y añadía que el PP siempre la ha defendido. El alcalde, además, anunciaba que, tras los comicios que espera ganar, presentará el estudio realizado por la US que justifica “un marco singular, sin complejos”.

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