Agentes de la Policía Nacional han detenido a cinco personas en diferentes puntos de la geografía española acusados de secuestrar a una mujer en Sevilla y trasladarla a Portugal, donde estuvo retenida cuatro días. Los arrestados se encontraban, además, en la "cúspide" de varias organizaciones criminales, dedicadas entre otras actividades ilícitas a introducir estupefacientes en la provincia de Sevilla a través del Guadalquivir.
Los hechos se remontan a finales de 2021 cuando dos varones, encapuchados y portando armas de fuego, irrumpieron en una vivienda del barrio de Palmete y secuestraron a una mujer en presencia de su marido e hijos, la introdujeron a la fuerza en un vehículo que esperaba en el exterior del domicilio, huyendo a toda prisa del lugar, según informa la Policía en una nota de prensa.
Los agentes averiguaron que la mujer habría sido trasladada a Portugal por sus captores, por lo que se activaron rápidamente los mecanismos de cooperación policial internacional para desarrollar una operación coordinada con la Policía Judiciaria portuguesa.
Los captores contactaron en varias ocasiones con los familiares de la víctima, con los que trataron de concertar un encuentro, a la vez que les facilitaban pruebas de que la misma se encontraba con vida, hasta que finalmente, la mujer fue trasladada de vuelta a España, dejándola los secuestradores en libertad, con buen estado de salud, de nuevo en Sevilla.
Casi un año después de lo ocurrido, la Policía Nacional llevó a cabo las primeras detenciones en la localidades de Dos Hermanas (Sevilla) y en Cabrera de Mar (Barcelona), donde arrestaron a dos de los autores materiales. Posteriormente, el resultado de las pruebas analizadas, permitió a los agentes confirmar el móvil del secuestro, que apuntaba ya en las primeras informaciones a un posible "ajuste de cuentas", lo que llevó a la policía "a centrar la investigación en las tres personas que se habrían encargado de idear el plan".
En el trascurso de la investigación, se comprobó, además, que estos autores intelectuales, se encontraban en la cúspide de varias organizaciones criminales dedicadas entre otras actividades ilícitas, a introducir sustancias estupefacientes en la provincia de Sevilla a través del río Guadalquivir.
La Policía consiguió detener al cabecilla de la organización en el Aeropuerto de Málaga y su lugarteniente, quien fue detenido en el Puerto de Algeciras, siendo ambos puestos a disposición de la Autoridad Judicial. Un tercer varón implicado en el entramado fue excarcelado para dar cuenta también de estos hechos ante el Juez que entendió de la causa.