Adiós al Muelle de San Ignacio, punto habitual de atraque de 'El Vaporcito de El Puerto', la mítica embarcación que un día unió El Puerto de Santa María y Cádiz.
Un rincón con mucha historia, que el pasado miércoles dejaba de existir. Su demolición responde a las obras de construcción de la segunda pasarela peatonal sobre el Río Guadalete.
Esta infraestructura se integra en el ambicioso proyecto del Paseo Fluvial, que se encuentra en su fase final de ejecución. La obra, cofinanciada en un 80% por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional y el 20% por el Ayuntamiento, cuenta con una inversión de casi 2,2 millones de euros y una ejecución de seis meses. Aunque su desaparición es un paso necesario para la construcción de la infraestructura peatonal y el desarrollo urbano, su memoria perdurará en los corazones de aquellos que conocieron y apreciaron su importancia en la vida portuense.