Se veía venir. Nefasta planificación, entrenador cómodo, desgaste físico como consecuencia de disputar tres competiciones y un largo etcétera de requisitos que con el tiempo, terminan por colocar a cada uno en su sitio. El fútbol como en la vida, es lo que suele determinar.
Ayer en las gradas del Villamarín de produjo por parte de la afición una circunstancia tan alabada como criticada según el prisma. La parroquia bética de deshizo en ánimos tras el cuarto gol del Barça para los jugadores por su esfuerzo, al mismo tiempo que se manifestaron cánticos al grito de Betis y Pepe Mel. ¿Ausencia de exigencia o amor incondicional? Según se mire. A reseñar, una única pancarta de crítica a la directiva.
Y es que pese a la mejoría en cuanto a juego del Betis de Mel después de la motivadora para algunos (numerito para otros) rueda de prensa del técnico verdiblanco tras la goleada recibida en el Calderón, no sólo no ha fructificado en materia de puntos, sino que el color del que pretendía pintar el madrileño el campeonato, ha cogido un tono más negro que el carbón.
La valentía y el grito en el cielo del míster heliopolitano ha quedado en el olvido. Sus palabras del domingo son esclarecedoras. Del “bajaremos diez puestos si no nos reforzamos del pasado año” al “estoy con ellos” de esta campaña.
Mientras, Bosch ya prepara la hoja de Excel para la Junta de Accionistas y Stosic busca un Dorlán Pabón en el mercado invernal aunque lo supedite a la vuelta de Rubén Castro para subir prestaciones de una plantilla que sufre una plaga de lesiones sin que esto sirva de justificación.
Paupérrimos números que cantan y el último referente como colista en los anales coleando. Aquel que dio en la 2008/09 con los huesos del Betis en Segunda División. Lo dicho. El algodón no engaña a nadie. Ni al más ingenuo.
Stosic: "Fichar o no depende de Rubén Castro”
“Nosotros no sabíamos en ningún momento el tiempo que iba a estar fuera. Fichar o no va a depender de cómo estemos de aquí a invierno. Si vemos lo de Rubén Castro se alarga iremos al mercado. Por otro lado, en el club sí que hubo un momento de reflexión en cuanto a que la plantilla está preparada para competir. A partir de ahí, pensamos que Mel está capacitado para sacar esto adelante. No hay duda. Es nuestro entrenador y no está solo como dicen por ahí”, afirmó el serbio este lunes en los micrófonos de Onda Cero.
