El Lucena logró una importante victoria en su visita a El Palo por el resultado de 0-1, que sirvió para que el conjunto cordobés salga de los puestos de descenso. De todas formas, el futuro del club no está nada claro porque un embargo tiene asfixiado a los jugadores porque llevan meses sin cobrar.
Uno de los futbolistas que está soportando esta situación es el sanluqueño Gonzalo Poley. Manifestó a Sanlúcar Información desde Lucena que “hay jugadores que llevan cuatro meses sin cobrar y otros tres, como es mi caso. El equipo está dando la cara porque por lo pronto estamos fuera del descenso pero cansado de estar así. La afición está preocupada pero nos apoya, que es importante”.
Asegura que “hay gente que lo está pasando mal. Firmé por dos temporadas pero en estas condiciones no seguiría en la que viene. A El Palo fuimos a jugar en nuestros coches particulares. Queremos dejar al equipo en la Segunda División B porque así será más fácil que podamos cobrar. Si me voy ahora lo pierdo todo”.
Añade que “estoy compartiendo casa con mi compañero Rafa Villanueva y hay que hacer frente a todos los meses. Mi familia me está echando un cable y es mi madre la que me prepara la comida, una situación que me recuerda a cuando estaba estudiando. En el club no puede entrar dinero por el embargo y los más perjudicados estamos siendo los jugadores”.
En lo deportivo, los jugadores sólo piensan en afrontar los dos siguientes encuentros, que será en casa ante la Balona y el Arroyo. Lo harán pensando que el tiempo también corre y de momento no hay soluciones a corto, medio o largo plazo.
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