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Jaén

El Ayuntamiento termina de arreglar los tejados del Camarín

Las goteras de los tejados del Santuario-Camarín de Nuestro Padre Jesús Nazareno han sido arregladas por el Ayuntamiento, tras cinco años de espera de la Cofradía, agradecida por la urgencia ante la situación de las arcas municipales.

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  • Interior del Santuario. -

Después de cinco años de espera, los tejados del Santuario-Camarín de Nuestro Padre Jesús Nazareno han sido arreglados. Los problemas de goteras por las lluvias han desaparecido tras la actuación llevada a cabo por el Ayuntamiento de la capital, responsable del mantenimiento del edificio religioso, y que ha dado respuesta a una petición reiterada de la junta de Gobierno de la Cofradía jienense.

Las obras comenzaron el pasado 22 de abril. Entonces se anunciaba un plazo de ejecución de entre 20 y 30 días, que finalmente se ha cumplido, ya que las obras han estado pendientes de que las condiciones meteorológicas fueran favorables. Ayer, la junta de Gobierno de la Cofradía emitió un comunicado de agradecimiento por el arreglo del tejado del templo que acoge a la imagen más querida y venerada de la ciudad del Santo Reino. “Siendo conscientes de la precaria situación que desde hace tiempo sufren las arcas municipales, valoramos esta generosa iniciativa y reiteramos nuestra gratitud por las obras acometidas con urgencia en el Santuario”, rubricaron.

Las obras se ejecutaron tras el diagnóstico realizado por  los técnicos del área de Urbanismo y de Mantenimiento Urbano sobre la zona del presbiterio, donde estaban concentradas las goteras. Era la zona nueva del emblemático edificio y desde la Cofradía confirmaron que el problema se arrastraba desde el año 2009.

Los técnicos apuntaron al problema de los canalones, que no eran capaces de desaguar y que finalmente  se han sustituido por unos de mayores dimensiones para recoger el agua de la lluvia.

Las primeras goteras aparecieron en febrero de 2010, cuando también el templo dejó evidencias de las humedades, de carácter más leve, detrás de la hornacina de la Virgen de los Dolores. De hecho, el agua dañó el manto de la Virgen.

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