La temporada 2014-15 pasó a la historia negativa del Córdoba CF porque en ella sufrió un doble descenso, el de su primer equipo a Segunda A y la de su filial, que tras debutar hace dos años en Segunda B, cayó a Tercera, para seguir los pasos de otros clubes españoles, como el Mallorca de la campaña 2012-13.
La caída del Córdoba repite la de los baleares, que entonces también cayeron de Primera a Segunda, mientras que su filial perdía igualmente la Segunda B.
Otros clubes representativos del panorama nacional sufrieron similares dobles descenso, aunque en inferiores categorías, así el Racing de Santander también hace tres temporadas, su primer equipo a Segunda B y el filial a Tercera y no porque fuese arrastrado por sus mayores.
En el curso 2010-11 el Deportivo de La Coruña sufrió el mismo trance que el Córdoba en Primera y Segunda B, caso idéntico al protagonizado por el Tenerife en la 2009-10 y por el Levante en junio de 2008.
Los últimos casos del siglo XXI de doble descenso deportivo en las dos principales categorías del fútbol nacional lo perpetraron el Málaga en la temporada 2005-06, con el primer equipo descendiendo a Segunda, y en su caso el filial cayó desde la categoría de plata a Segunda B; y el Alavés, que en la misma temporada descendió a Segunda, mientras que el Alavés B tomó el camino de Segunda B a Tercera división, según fuentes de la base de datos de La Liga en Números.
El defensa uruguayo Adrián Gunino, por su parte, que esta temporada debuto en la Primera División española de la mano del Córdoba CF, se ha convertido en el futbolista que más partidos ha jugado en la historia de la máxima categoría española y no ha conocido el triunfo, tras superar al argentino Roberto Luis Trotta.
Gunino sumó veintitrés partidos con el Córdoba en la Liga BBVA, pero no participó en las únicas tres victorias de los blanquiverdes, ante Athletic de Bilbao, Granada y Rayo Vallecano, para acumular siete empates y dieciséis derrotas, mientras que Trotta, que hasta ahora ostentaba este récord negativo cuando jugó en el Sporting de Gijón de la campaña 1997-98, sumó cuatro empates y catorce derrotas.
El uruguayo llegó a España en verano de 2012 cedido por el Atlético Fénix uruguayo a la UD Almería, con la que logró su primer ascenso a Primera, hito que repitió la pasada campaña con el Córdoba, en el que se enroló igualmente a préstamo pero en el mercado invernal.