El tiempo en: Rota
Publicidad Ai
Publicidad Ai

Sevilla

Bazar Victoria, con raíces decimonónicas

Con la clausura de Casa Rubio, fundada en 1853 por el marqués de Coromina, tienda decana de la calle Sierpes, especializada en paraguas, sombrillas y abanicos, el decanato mercantil de la calle pasó en enero de 2005 a Papelería Ferrer...

Publicidad Ai Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
Publicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai
  • Edificio a principios del S.XX -

El comercio establecido en la ciudad a finales del siglo XIX y principios del siglo XX, debemos contemplarlos desde dos aspectos: el de las pequeñas y medianas empresas y el del comercio en general. Todos configuran un carácter ciudadano que ayuda a comprender cómo era la vida socioeconómica sevillana en aquellos últimos años del siglo XIX y primeros del XX. En el centro de la urbe existía un comercio que ha sido la base durante muchos años de tradiciones mercantiles locales.

En ferretería, estaban La Llave, el Bazar Victoria y El Llavín; en tejidos, Almacenes del Duque, Almacenes de Camino, de Vadillo, Zabala y Peyré, con sus espectaculares salones de exposición; la Casa Honda, Ciudad de Sevilla, Maisón de Blanc, El Águila; en espejos y molduras, Leandro del Pueyo; en papelería, la casa Domingo Queraltó y Ferrer; la fábrica de pianos de Luis Piazza; la casa de música de Damas, sucesor de Bergali; los Bazares Español, Sevillano, Estrella Roja, Inglés y Japonés, con sus "novedades de París, Berlín, Londres y Viena...", El Cronómetro, Casa Rubio…

Con la clausura de Casa Rubio, fundada en 1853 por el marqués de Coromina, tienda decana de la calle Sierpes, especializada en paraguas, sombrillas y abanicos, el decanato mercantil de la calle pasó en enero de 2005 a Papelería Ferrer, fundada en 1856 por José Ferrer y Vidal, seguida de la Confitería

La Campana, fundada en 1885 por Antonio Hernández Merino. Quedan también con raíces decimonónicas los tres casinos históricos, el Círculo de Labradores y Propietarios (1856), el Círculo Mercantil e Industrial (1868) y el Centro Cultural de los Ejércitos (1881). El Cronómetro (1901) y Casa Damas (1904), ésta clausurada por ahora, y la Confitería Ochoa (1910), siguen en antigüedad mercantil.

Las fábricas de tejidos más importantes eran La María, de tejidos de hilo y algodón; la de Faustino Martín y Cía; la de Pérez Salvador, que también era fábrica de alpargatas, y otras hasta casi una veintena, entre las que figuraban algunas dedicadas al hilado de yute, como las fábricas de la Viuda de Alpériz y Nicolás de Pineda y Cía.

La guía Zarzuela (1864-1957), informa regularmente de los establecimientos comerciales sevillanos, sobre todo desde 1910 en adelante cuando incluye publicidad, y en sus páginas pueden confirmarse que  la razón social Almacenes de Camino estaba formada por Vadillo, Zabala y Peyré, S. en C., desde el último tercio del siglo XIX, y establecida en un amplísimo edificio de la calle Francos, número 50, con salida a la futura calle Álvarez Quintero. Un edificio que en el siglo XVI fue residencia del humanista sevillano Gonzalo Argote de Molina.

Los Caminos, como se conocían popularmente, eran en 1905 “los almacenes de tejidos y novedades más antiguos de la ciudad”, según el anuario Sevilla Industrial y Artística de 1906, que incluye fotografías de Juan Barrera Gómez que hoy son referencias preciosas del comercio del Novecientos.
Reproducimos tres estampas del Bazar Victoria, último testimonio de la ciudad de los bazares.

Bibliografía básica: Félix González de León, Noticia histórica del origen de los nombres de las calles […], Imprenta de José Morales, 1839; Manuel Álvarez-Benavides y López, Explicación del plano de Sevilla, Imprenta de Izquierdo, 1868; Guía Zarzuela, años 1864, 1895, 1900, 1915, 1930 y 1957; Siro García López y Manuel Jiménez López, Nomenclátor de la ciudad, Ayuntamiento, 1937; Santiago Montoto, Las calles de Sevilla, Imprenta Hispania, 1940; Manuel Ferrand y Alberto Viñals, Calles de Sevilla, Planeta, 1976; Antonio Collantes de Terán Sánchez, Diccionario histórico de las calles de Sevilla, Ayuntamiento-Junta de Andalucía, 1993, tomo I; José María de Mena, Las calles de Sevilla, Editorial Castillejo, 1994. Alberto Villar Movellán, Arquitectura del Regionalismo en Sevilla (1900-1935), Diputación Provincial, 1979; Concha Rioja López, La tienda tradicional sevillana, Junta de Andalucía, 1992; Ángel Pérez Guerra, Comercios sevillanos que hacen historia, Editorial Castillejo, 1991].

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN