El Gobierno local ultima la recuperación de la figura del Defensor de la Ciudadanía, desaparecida en el transcurso de la pasada legislatura tras una década en la que se hicieron cargo de esta oficina Agustín García Lázaro -primero- y Francisco Reinoso -después-.
De este modo, el Ejecutivo que preside Mamen Sánchez pretende cumplir con uno de sus compromisos electorales, que pasaba precisamente por la recuperación de este servicio de intermediación entre el Ayuntamiento y la ciudadanía.
El proceso se encuentra bastante avanzado y de hecho era intención del Gobierno local que el nombramiento del nuevo Defensor de la Ciudadanía hubiera podido llevarse a cabo en el Pleno de septiembre, si bien parece que finalmente habrá que esperar a la sesión ordinaria de octubre.
Es intención del Ejecutivo que la persona que tome el relevo de Agustín García Lázaro y Francisco Reinoso cuente con el mayor respaldo posible de los colectivos ciudadanos, de ahí que se haya iniciado ya una especie de sondeo de cara a encontrar al mejor candidato posible para desempeñar esta labor.
El nombre que salga de este proceso de consulta será elevado al Pleno, que deberá ratificar el nombramiento.
En esta nueva etapa, se pretende que esta figura alcance un protagonismo mayor al que tuvo en la experiencia anterior, convirtiéndola en intermediadora entre la Administración local y el conjunto de los ciudadanos.
Reinoso se marchó en junio de 2013
El anterior Defensor de la Ciudadanía entregó las llaves de la oficina al Ayuntamiento en junio de 2013, después de esperar en vano que el Gobierno local aceptase la dimisión de su cargo.
La figura del Defensor fue sustituida por una comisión de sugerencias, creada por el anterior Gobierno local al amparo de la Ley de Grandes Ciudades a la que Jerez se encuentra acogida.