El tiempo en: Rota
Publicidad Ai
Publicidad Ai

Sevilla

40,7 millones se quedaron sin invertir en 2015

La Corporación sólo invirtió el 33,48 por ciento de lo previsto y las empresas municipales, sólo el 43,69 por ciento

Publicidad Ai Publicidad AiPublicidad Ai Publicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai
  • Ayuntamiento de Sevilla -

La Sevilla de los más de 80.000 parados desde hace cuatro años y medio se permite el lujo no sólo de devolver o renunciar a 5,3 millones de euros concedidos por la Junta de Andalucía para contratar a desempleados mayores de 30 años, sino también de dejar de invertir al finalizar 2015 un total de 40,7 millones de euros de los que disponían la corporación municipal y sus empresas y organismos autónomos con tal finalidad.

El hoy delegado de Hábitat Urbano y portavoz adjunto del grupo municipal socialista en el mandato anterior, Antonio Muñoz, repitió constantemente cuando el PSOE estaba en la oposición y era Zoido el alcalde que a falta de grandes inversiones privadas en la ciudad, debido a la crisis, el Ayuntamiento quedaba como el principal motor de la economía sevillana. Sin embargo, a juicio de Antonio Muñoz ese motor solía estar al ralentí o incluso gripado, a la luz del grado habitual de ejecución del Presupuesto municipal.

La realidad ha avalado la denuncia de Muñoz, ya que en 2015, un ejercicio en el que puede decirse que Zoido gobernó durante el primer semestre y Espadas durante el segundo, el Consistorio finalizó el año dejando de utilizar el 56,31% de todo el dinero presupuestado para inversiones (sumando a las partidas iniciales las modificaciones presupuestarias incorporadas a lo largo del ejercicio).
Tal como sostenía el hoy delegado de Hábitat Urbano, “si no hay inyección de dinero municipal en la ciudad, toda Sevilla se resiente y sufre las consecuencias de la falta de gestión del Consistorio”.

Partidas presupuestarias
El Ayuntamiento presupuestó inicialmente para inversiones reales en 2015 la cifra de 18.990.748,15 euros, cantidad que se incrementó durante el ejercicio con 12.229.390,82 euros como consecuencia de las habituales modificaciones presupuestarias. Así pues, el total resultante fue de 31.220.138,97 euros.

A este dinero habría que unir el destinado a transferencias de capital a las empresas y organismos autónomos municipales, una partida inicial de 23.906.290,73 euros, a las que merced a las referidas modificaciones presupuestarias se añadían posteriormente un montante de 17.172.352,56 euros.

El montante en este capítulo era de 41.078.643,29 euros. Sumando todos los conceptos de inversión, el Ayuntamiento podría haber inyectado en la economía local un total de 72.298.782,26 euros en plena crisis. De hecho, en el acto de presentación de las Cuentas municipales para el pasado año, celebrado el 9 de diciembre de 2014, Zoido  anunció que las inversiones iban a aumentar en un 20%.

De poco sirve incrementar las inversiones sobre el papel si luego no se ejecutan, tal como revela el grado de ejecución del Presupuesto al terminar el año pasado. De los 31,2 millones para inversión del Consistorio quedaron por aplicar 20.767.733,63 euros, y de los 41,07 millones de transferencia de capital a las empresas y organismos autónomos quedaban pendientes 19.949.445,26 euros.

Así pues, el Ayuntamiento sólo había invertido el 33,48% del dinero para inversiones reales, y las empresas y organismos municipales, el 43,69%. Si en conjunto se habían reservado 72,29 millones de euros, realmente sólo se han aplicado 31,58 millones y dejado en la recámara 40,71 millones. Por resumirlo gráficamente, por cada euro para inversiones, el Ayuntamiento y sus empresas sólo han dispuesto finalmente de 43 céntimos.

Al ralentí
Desde el gobierno socialista se reconoce que cuando Espadas llegó a la Alcaldía, a mitad del año pasado y ya en puertas del verano, con lo que de parálisis administrativa debido a las vacaciones supone dicha estación, no se había ejecutado ni el 20% del Presupuesto aprobado por Zoido, a lo que hay que añadir que los montantes de las modificaciones presupuestarias se suelen incorporar tan tarde -habitualmente a partir del mes de septiembre- que no da tiempo a redactar los proyectos para acometer las inversiones con ese dinero suplementario.

Un caso significativo de la situación que se encontró Espadas fue el Plan Urban para el Polígono Sur, aprobado desde el año 2009 y en el que a falta por entonces de seis meses para su conclusión sólo se habían invertido 5 millones de los 13 millones previstos, con riesgo de perder la financiación de la Unión Europea. El nuevo gobierno municipal tuvo que emprender una carrera contra el reloj para acelerar proyectos parados y al final de año se habían utilizado 12 de los 13 millones del plan.

Otro ejemplo lo constituye el Instituto Municipal de Deportes, en el que la ejecución presupuestaria no llegaba ni al 14%, y en los colegios raramente se invierte más del 50% del dinero consignado, unos porcentajes que explican, a juicio del gobierno de Espadas, los superávit de que alardeaba Zoido y  que el gran problema que tiene el Ayuntamiento no es tanto presupuestario como de capacidad de ejecución, una dinámica que Espadas pretende invertir para que se convierta realmente en el motor de la economía local.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN