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Campo de Gibraltar

Los tres acusados niegan relación con la cocaína hallada entre bananas

La sección de la Audiencia Provincial en Algeciras acoge el inicio del juicio, con tres acusados, por una aprehensión de 153 kilos de droga en mayo de 2016

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  • S.B.E.M., A.J.B. y J.A.R.G., los tres acusados. -

La sección de la Audiencia Provincial en Algeciras celebra desde este martes el juicio contra tres presuntos implicados en una red de narcotráfico. La Fiscalía pide doce años de prisión y tres millones de euros de multa. Los hechos se remontan a mayo de 2016, cuando Policía Nacional y Vigilancia Aduanera hallaron 153 kilos de cocaína en un cargamento de plátanos procedente de Colombia.

Los tres acusados prestaron declaración ante la jueza en la primera sesión del juicio. Ninguno de ellos admite conocer la existencia del cargamento de cocaína entre las bananas.

J.A.R.G., administrador de una empresa de frutas en Lepe (Huelva), está acusado por ser sus instalaciones el destino de los dos contenedores seguidos por los investigadores desde Algeciras.

Según declaró el acusado, un transportista le puso en contacto con una empresa importadora que le ofreció comprar los dos contenedores de bananas (2.160 cajas) a un precio muy favorable (a 10,25 euros la caja, cuyo precio rondaba los 12 euros en aquel momento), por lo que aceptó la oferta.

Fue él quien indicó a los policías que el 1 de mayo de aquel año había mantenido una reunión en La Palma del Condado (Huelva) con el transportista, A.J.B., otro de los acusados en este juicio, y un tercer individuo a quien señala como S.B.E.M., el tercer acusado, cuya presencia en ese encuentro no ha podido ser determinada por los investigadores.

S.B.E.M., de origen magrebí, regentaba varias fruterías en Madrid hasta que constituyó una empresa para vender fruta, Marsol, en 2014, si bien no comenzó a importar hasta enero de 2016.

La Policía le investigaba porque las cantidades importadas les resultaron excesivas para una empresa de ese tamaño. Sus importaciones iban dirigidas siempre hacia dos empresas con excepción del cargamento objeto de este juicio. De hecho, los dos contenedores iban destinados a uno de sus compradores habituales, en Madrid, pero con la mercancía ya en Algeciras cambiaron el destino de la misma.

En su declaración ante la jueza asegura que no estuvo en la citada reunión del 1 de mayo y que fue L.B., el exportador colombiano al que compraba la fruta, quien le indicó que ese cargamento en concreto no iría al destino habitual, sino a la empresa ubicada en Lepe y exigió que el transportista esa vez no fuese A. J. B., en concreto.

La implicación de A.J.B. se debe a que el propietario de Marsol había contactado con varios transportistas por tener interés en exportar fruta a Portugal. Fue este transportista, residente en Málaga, quien le puso en contacto con J.A.R.G., el empresario lepero, que vende al país luso el 80% de su mercancía.

Los primeros policías en prestar testimonio han explicado que las imágenes logradas de las cámaras del hotel de La Palma del Condado no tienen sonido y que además, no se pudo determinar con precisión quién era el tercer individuo presente, salvo que era “árabe”. En un primer momento lo identificaron como R.E.A.E.A., a quien vinculan a S.B.E.M.

Aunque los agentes mantienen que tras su detención J.A.R.G. mostró “arrepentimiento” y “voluntad de colaboración”, sospechan de que en su almacén parecía “haber poca actividad” y que fue “el único receptor” de los contenedores de bananas.

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