El Salón Noble del Ayuntamiento de Jerez acogió este viernes la entrega de los Premios de la Bulería, una iniciativa impulsada este año por Publicaciones del Sur, con el patrocinio de Fundación Unicaja, para reconocer públicamente, a través de los votos de los espectadores, el mejor cante, toque y baile de la pasada edición de la Fiesta de la Bulería.
Los ganadores de esta primera convocatoria, según las votaciones emitidas a través de whatsapp, han sido Manuel Carpio Heredia Juanillorro, a título póstumo, por el mejor cante; José Gálvez, por el mejor toque; y Manuel Carpio, por el mejor baile. El reconocimiento a cada uno de ellos va incluso más allá del premio en sí, puesto que Manuela Carpio fue además la directora del espectáculo principal de la programación de este año, José Gálvez fue el director musical del espectáculo dedicado a Japón y autor de un solo de guitarra dedicado a Moraíto -no pudo estar en el acto puesto que a esa hora estaba en el país nipón presentando su nuevo espectáculo-, y la actuación de Juanillorro se convirtió en su despedida de los escenarios, puesto que falleció apenas dos días después.
Hubo en este sentido, un notable e inevitable componente emocional en la entrega de los premios, vinculado en especial al recuerdo del cantaor jerezano, al tiempo que el acto se convirtió en una reivindicación del valor y el papel que la Cultura debe desempeñar en Jerez, y muy especialmente a través de sus artistas flamencos.
Juan Garrido, presentador del acto, recordaba lo que Manuel Carpio “disfrutó aquella noche”, así como su emoción ante la posibilidad de que el público le pudiera reconocer su actuación con el premio. Manuela Carpio, de hecho, durante su discurso de agradecimiento así lo puso de manifiesto: “Mi gordo -como cariñosamente quiso recordarlo- era un niño que tenía ganas de que Jerez le dijera ya que como cantaor era un artista. Él ya sabía que lo era, pero era muy humilde. Mi premio se lo cedo a él. Nos ha dejado rotos, pero estoy orgullosa de que Jerez se haya acordado de él así. Esa noche disfrutó. Nunca lo había visto tan feliz; incluso al despedirse me lo dijo, me voy súper feliz de aquí. Viva mi Juanillorro”.
También Javier Vela, de Fundación Unicaja, recordó la impronta del cantaor jerezano, al que conoció y disfrutó en varios espectáculos, así como la alcaldesa, Mamen Sánchez, que se refirió a la dificultad de estar celebrando la entrega de un premio a un artista que ya no se encuentra entre nosotros, pero reclamó el valor de ser un premio que “le ha concedido el pueblo, la afición, que libremente lo ha elegido y lo ha votado”.
Sánchez también resaltó, por supuesto, la labor de José Gálvez, “un gran artista que ha tendido la mano desde Jerez con Japón, y la de Manuela Carpio, “una de las grandes mujeres del flamenco en Jerez, y un orgullo para nosotros por haber contado con su actuación y con su dirección para un espectáculo realizado con tanto cuidado y cariño”.
Pero la alcaldesa también aprovechó la ocasión para ir más allá y hacer una encendida defensa de la apuesta por la Cultura y, muy especialmente, por la de los artistas jerezanos, los que llevan Jerez y el flamenco por todo el mundo: “Tenemos la obligación de que nuestros artistas también tengan la oportunidad de actuar en Jerez y también tenemos la obligación de poner en valor la Fiesta de la Bulería, que nos la encontramos muertecita”. En sus palabras había una alusión directísima a los que han criticado el presupuesto destinado este año al citado evento, aunque convertida en ocasión para hacer valer el papel que debe desempeñar la Cultura en la ciudad.
“Quien critica los cachés pagados en la Fiesta de la Bulería deberían saber que nuestros artistas son impagables, que no se suben al escenario solo por dinero, sino porque es su tierra y es su bulería. Nos dicen además que es deficitaria, y la Cultura no es deficitaria. El alumbrado de la Feria cuesta 800.000 euros y nadie pregunta si es deficitario ni cobramos una entrada para verlo. La Cultura siempre cuesta dinero, pero es nuestra obligación apostar por ella y que llegue a todo el mundo, y más aún si se trata del flamenco de Jerez”.
