Tiempo de descanso pero a la vez de reflexión para la plantilla del Recreativo de Huelva, que a falta de una jornada para llegar al ecuador de la competición, está claro que está rindiendo muy por debajo de lo que se esperaba al inicio de la liga. El Decano, que se ha marchado de vacaciones noveno con 23 puntos, a diez del objetivo de los puestos de promoción de ascenso y cuatro por encima de la promoción de descenso, debe mejorar y mucho en su rendimiento y sobre todo en los resultados si quiere tener al final de la fase regular alguna opción de poder pelear una nueva temporada por el ascenso de categoría.
Match-ball salvado
Pero para poder estar entre los mejores, el equipo de Alberto Monteagudo deberá ser mucho más regular que lo que está mostrando hasta la fecha, ya que no ha sido capaz de hacer dos partidos buenos seguidos y aunque ganó tres jornadas seguidas al inicio de la competición, lo que lo llevó a ser segundo en la tabla en la sexta jornada, luego cayó en picado hasta el punto de llevarse nueve jornadas seguidas sin ganar, lo que a punto estuvo a principios de este mes de costarle el puesto al técnico albiazul, que se salvó ‘in extremis’ tras ganar en Sevilla al filial hispalense.
Al menos las sensaciones en este último tramo de la competición invitan al optimismo, ya que de los últimos cuatro partidos (tres en liga y uno en Copa del Rey), el Decano ha ganado tres y ha empatado uno y lo mejor de todo es que en esos cuatro partidos ha encajado solo un tanto, lo que da muestras de solidez defensiva y así lo tendrá más fácil para escalar posiciones, aunque también tendrá que estar más acertado a la hora de ver puerta y volver a ser un equipo realizador.