Jornadas abiertas en la lonja para ayudar al sector pesquero

La concejalía portuense de Fomento, Agricultura y Pesca proyecta llevar a cabo unas jornadas abiertas en la lonja de pescado como forma de ayudar en la reactivación del sector pesquero del municipio.

El proyecto busca, en palabras del edill delegado, Antonio Jesús Ruiz, “dar a conocer a los portuenses, sobre todo a los más jóvenes, todo lo que conlleva el pescado, que conozcan las distintas variedades que llegan a la lonja de El Puerto y que conozcan la lonja, que la puedan visitar y que sepan qué es y para que sirve ese edificio qué está al otro lado del río”.

La Concejalía pretende que las jornadas se complementen con la participación de la Escuela de Hostelería de Cádiz. Su colaboración consistiría en dar a conocer “algunas nociones de cómo se pueden cocinar y preparar las especies de pescado que se comercializan en la lonja de El Puerto de Santa María”, indica el concejal andalucista.

“Queremos incentivar la lonja y lograr que los jóvenes asuman el hábito de ir al mercado a comprar pescado y que sepan cocinarlo”, argumentó el responsable municipal de Pesca.

Antonio Jesús Ruiz enmarca esta iniciativa dentro de las medidas que el Gobierno municipal viene adoptando para ayudar, dentro de sus posibilidades, al sector pesquero portuense.

Dentro de estas medidas se encuentra también el convenio firmado con Caja Inmaculada (CAI) por el que cuando se produce una parada biológica que afecta a la flota de El Puerto y que cuenta con ayudas de la Junta de Andalucía, esta entidad financiera adelanta a los pescadores y armadores la cantidad de las ayudas.

La medida, que tan sólo se está llevando a cabo en El Puerto, ha provocado incluso que barcos pesqueros pertenecientes a otras lonjas hayan querido beneficiarse del convenio, algo que no es posible puesto que el acuerdo sólo afecta a los barcos de la flota portuense.

Mientras se llevan a acabo estas medidas de apoyo y promoción, el Ayuntamiento sigue esperando una respuesta por parte de la Consejería de Agricultura y Pesca de la Junta de Andalucía a su petición de reorganización de los grupos pesqueros de la provincia (Campo de Gibraltar y Frente Atlántico) que han dejado fuera de forma incomprensible a El Puerto. Al estar fuera de estos grupos, los armadores portuenses no podrán acceder al último reparto de las ayudas de los fondos europeos.

Ya el Pleno municipal apoyó instar a la Consejería para que se arreglase la situación y se incluyese a la flota pesquera portuense dentro de uno de los grupos pesqueros de la provincia.

La flota de pesca de El Puerto cuenta con 23 barcos arrastreros de bajura, de los que 17 integran la Asociación de Armadores, que faenan en el Golfo de Cádiz. Cada barco cuenta con una media de cinco tripulantes, trabajadores a los que hay que sumar dos más en tierra encargados de las redes.

Antonio Ares: “La diferencia de precios es muy alta”

“La venta en lonja está muy mal”, se queja el presidente de la Asociación de Armadores de El Puerto, Antonio Ares, que subraya como negativo que existe “mucha diferencia entre lo que se paga en lonja y al precio que se vende el pescado en los mercados y pescaderías. La diferencia puede llegar hasta un cien por cien en el precio”. El presidente, además, entiende que “con la crisis económica que tenemos la gente no tiene para comprar mucho pescado”. A pesar de la situación, de la que Ares culpa a los intermediarios, en estos días la preocupación es menor porque después de dos meses de parada biológica, que finalizaron el 24 de noviembre, y tras los temporales sufridos, “hemos conseguido quince días que no tendremos que parar, por lo que tenemos que dar las gracias a la Administración. En este caso, “la ayuda por la parada biológica es poder seguir trabajando, teniendo que parar solamente quince días a partir del próximo 1 de febrero”. Cuando llegue la parada, la preocupación será conseguir certificados de la Junta que supongan que los trabajadores que vayan al paro no pierdan la antigüedad. Para el presidente de los armadores “ahora mismo la parada biológica no es necesaria para regenerar el caladero, porque con la parada que acabó en noviembre y los 28 días de vendaval los barcos sólo han trabajado 19 días hasta hoy”.