Los trabajadores de la compañía Tranvía de Cádiz anunciaron ayer su intención de establecer un calendario de huelga para noviembre debido a la actitud “chulesca” de la dirección de la empresa en la negociación del convenio colectivo y al “caos” del tráfico en la capital gaditana a consecuencia de las obras que se ejecutan en el paseo de Canalejas para la ampliación del aparcamiento.

El presidente del comité de empresa, Manuel Góngora, explicó que los trabajadores se reunirán en asamblea a partir del 2 de noviembre para fijar el calendario de huelga. Según dijo, llevarán a cabo esta medida debido a la actitud de la empresa en relación al convenio, que “se lleva negociando diez meses” sin alcanzar un acuerdo.
Además, acusó a la empresa de haber aplazado las tres últimas reuniones “poniendo multitud de excusas”. De hecho, ayer tenían que haber celebrado un encuentro que “desconvocaron el miércoles”, quedando aplazado al próximo día 31, aunque “visto lo visto no hay garantías de que se vaya a celebrar”. 
El representante sindical consideró que se trata de “una falta de respeto” hacia el comité de empresa y criticó la “actitud chulesca” de la empresa que, según dijo, en la última reunión les hizo “una oferta inferior a la acordada hace ya cinco meses”.

Según dijo, el punto “más espinoso” de la negociación se debe a que la dirección de la compañía “se niega a incorporar al convenio una normativa europea, que es Ley, que le obliga a ampliar el descanso de 15 a 30 minutos”.
Por otra parte, Góngora aludió a la “insostenible” situación derivada de las obras que se están acometiendo en el paseo de Canalejas por parte del Ayuntamiento para la ampliación del número de plazas de un parking.
Instó al Consistorio y a la empresa a “mejorar la información a los ciudadanos” en relación a la ubicación de las paradas de terminaciones de línea que, aseguró, “cambian cada día” y provocan malestar.