Moresco vaticinó que la zona de las calles Micaela Aramburu, Jesús de los Milagros y Palacios, incluidas en esta fase, no volverá a sufrir los efectos de más obras “en muchos años, porque en el diseño está todo previsto desde el abastecimiento de agua hasta el alumbrado y la telefonía”.
El alcalde ha aclarado a pie de obra que los trabajos tienen un presupuesto de 1.086.000 euros, el 60 por ciento aportados por el Ayuntamiento y el 40 por ciento restante por los Fondos Europeos de Desarrollo Regional (Feder), “a los que hay que sumar unos 200.000 euros que invertirá Aguas del Puerto (Apemsa) para la mejora de las infraestructuras de saneamiento y abastecimiento de aguas”.
“Miramos con mimo, al igual que en todas las obras en calles y edificios públicos, el tema de la accesibilidad”, aseguró el primer edil que señaló que “el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) y el plan del casco histórico han adelantado sus previsiones en esta zona para que esta actuación se coordine con el futuro diseño de la ciudad. Lo que se va a hacer coincide perfectamente con lo dispuesto en el plan del casco histórico y en el Plan de Movilidad. No se va a levantar ni poner un solo adoquín que no sea adecuado a las previsiones del planeamiento futuro de la ciudad”.