El deporte, como cada año, se hace cabida en la Navidad de la mano de una de las competiciones más tradicionales del atletismo local. Además, una de las más familiares. Cerca de 300 corredores de todas las edades se reunieron en la tarde de ayer jueves en el Bulevar Bahía de Cádiz para participar en la vigésima edición de la Carrera Popular de Navidad.
Una competición que echó el cierre al Circuito de Carreras Populares de Navidad por todo lo alto, con un ambiente festivo y entrañable que pudieron compartir personas de todas las edades, disfrazadas con sus mejores atuendos navideños. No faltó Santa Claus. Tampoco el árbol, ni los Reyes Magos, que, en su larga travesía desde Oriente, hicieron parada para participar. Hasta el corazón del Grinch quedó derretido en esta bonita iniciativa.
La diversión, después de todo, fue lo más importante de una carrera, que siempre tuvo un trasfondo solidario. Y la solidaridad mueve fronteras. Buena parte de los participantes nos visitaron desde otros municipios vecinos como El Puerto, Sanlúcar de Barrameda, Jerez o Chipiona, además de Trebujena, que contó con una presencia destacada, sobre todo en las categorías inferiores.
Como cada año, los beneficios recaudados fueron destinados al comedor solidario a través de la Asociación de Familiares y Enfermos de Alzhéimer ‘El Arenal’. Allí, desde las puertas del centro a partir de las 16:00h., salieron todas las carreras. Todas contaron con una distancia y un recorrido diferentes en cada categoría, adaptados a la edad de los atletas. La prueba absoluta, de cinco kilómetros de distancia, fue muy dura y exigente. No tanto por el recorrido, que llegó hasta la zona más céntrica del pueblo discurriendo por todo el largo del paseo marítimo, sino por la entrada en acción de un protagonista inesperado: el viento. Hasta un superdotado como Pedro Garrido también mencionó la influencia de este factor meteorológico en el desarrollo de la competición.
El corredor del Club de Atletismo Runchip Catunambú fue quien terminó alzándose con la victoria, completando el recorrido en 15’30’’ a un impresionante ritmo de 3’06’’minutos el kilómetro. En categoría femenina, la primera mujer fue María José Ruiz-Mateos, con un tiempo de 20’07’’ a 4’02”minutos el kilómetro.
También tuvo nivel, por tanto, una carrera que puso el deporte en el primer plano de una Navidad de lo más ajetreada en el pueblo de Rota.