Si bien un juzgado de Sevilla había fijado para las 10,00 horas de este jueves una orden de desahucio sobre la vivienda correspondiente al número tres de la calle Gilena, en el barrio del Cerro del Águila, la citada orden ha quedado suspendida, al menos de momento.
La orden de desahucio estaba fijada para esta vivienda enclavada cerca de la calle Tres Forcas, donde la semana pasada se suspendía por cierto otro desahucio, aunque con matices diferentes al de esta ocasión, protagonizada por una familia formada por los progenitores, cuatro hijos e hijas, las parejas de algunos de ellos y "dos niños chicos", según ha dicho a Europa Press Francisco, uno de los principales activistas de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca del distrito Cerro Amate.
Según ha detallado, uno de los hijos de este matrimonio contrajo un préstamo hipotecario con Bankia para la adquisición de un piso, con la vivienda de sus padres como aval para dicho préstamo. Al no satisfacer las obligatorias cuotas del préstamo hipotecario por circunstancias económicas "sobrevenidas" encuadras en el actual contexto de crisis, el banco "ha tirado de los avalistas", aún cuando este hijo del matrimonio habría abandonado el piso para el que concertó el préstamo y habría intentado negociar una dación en pago con Bankia. "Ha intentado entregar el piso, pero no le aceptan las llaves", ha dicho.
Al respecto, ha considerado que este procedimiento de desahucio es "ruin e infame", sobre todo porque "Bankia nos ha costado 30.000 millones de euros a los españoles". Una joven hija del matrimonio, de su lado, ha dicho a Europa Press que la vivienda sobre la que pesaba la orden de desahucio es la vivienda familiar "de toda la vida". "La casa está totalmente pagada. Llevamos 16 años viviendo aquí y ahora nos quieren echar. Es muy injusto", ha lamentado.
Varias decenas de personas, unas 60 o 70, entre ellos activistas de la PAH, los concejales de IU-CA Daniel González Rojas y Eva Oliva y la edil de Participa Sevilla Cristina Honorato han celebrado una concentración a las puertas de la vivienda. Por parte de la Policía Nacional, tan sólo han hecho acto de presencia dos agentes a bordo de un coche patrulla, quienes se han visto involucrados en un altercado con un vecino claramente alterado, sin que el incidente llegase a más.
Finalmente, las "gestiones" de la PAH ante el juzgado han derivado en la averiguación de que la orden de desahucio habría sido suspendida, al menos de momento.