Romario pasa una noche en la cárcel
Romario pasó una noche en la cárcel por no abonar la pensión a su primera mujer.
El ex futbolista brasileño Romario fue puesto en libertad hoy, después de pasar la noche en una comisaría de Río de Janeiro por atrasarse en el pago de una pensión alimenticia a su primera esposa.
Según la policía de Río, el ex integrante de la selección brasileña de fútbol ya habría pagado la deuda de 90.000 reales a su ex cónyuge, Mónica Santoro, para conseguir la libertad.
Romario participó durante la tarde de ayer en una audiencia en Barra da Tijuca, en la zona oeste de Río, ante el juez que decretó su prisión. La audiencia duró cerca de 45 minutos y en ella también se presentaron Mónica Santoro y la hija de ellos, Moniquinha.
"Durante la audiencia, Moniquinha estaba muy emocionada y lloró", dijo un funcionario de la corte de Barra da Tijuca. A la prensa le fue prohibida la entrada al lugar y Romario, su ex esposa y su hija se retiraron sin formular declaraciones. El ex delantero de Brasil sonrió para periodistas y fotógrafos tanto cuando salió de la comisaría como cuando llegó al tribunal.
Romario fue detenido el pasado martes en su casa, situada en el barrio de lujo de Barra da Tijuca, por no haber pagado la pensión alimenticia de sus hijos Moniquinha y Romarinho y pasó la noche en una comisaría de esa localidad.
El campeón del mundo con la selección brasileña en la Copa Mundial de fútbol de 1994 compartió celda con otros dos detenidos, también presos por no pagar pensiones alimenticias.
Según el funcionario Carlos Augusto Nogueira Pinto, titular de la decimosexta Comisaría de Policía, Romario durmió poco y pasó la noche y la madrugada conversando con sus compañeros de celda.
Durante la noche del martes un amigo del ex delantero le llevó comida, pero no le permitieron recibir alimentación especial. En el 2004, Romario ya había sido detenido por problemas en el pago de la pensión alimenticia a los dos hijos que tuvo con Mónica Santoro.
Según la policía de Río, el ex integrante de la selección brasileña de fútbol ya habría pagado la deuda de 90.000 reales a su ex cónyuge, Mónica Santoro, para conseguir la libertad.
Romario participó durante la tarde de ayer en una audiencia en Barra da Tijuca, en la zona oeste de Río, ante el juez que decretó su prisión. La audiencia duró cerca de 45 minutos y en ella también se presentaron Mónica Santoro y la hija de ellos, Moniquinha.
"Durante la audiencia, Moniquinha estaba muy emocionada y lloró", dijo un funcionario de la corte de Barra da Tijuca. A la prensa le fue prohibida la entrada al lugar y Romario, su ex esposa y su hija se retiraron sin formular declaraciones. El ex delantero de Brasil sonrió para periodistas y fotógrafos tanto cuando salió de la comisaría como cuando llegó al tribunal.
Romario fue detenido el pasado martes en su casa, situada en el barrio de lujo de Barra da Tijuca, por no haber pagado la pensión alimenticia de sus hijos Moniquinha y Romarinho y pasó la noche en una comisaría de esa localidad.
El campeón del mundo con la selección brasileña en la Copa Mundial de fútbol de 1994 compartió celda con otros dos detenidos, también presos por no pagar pensiones alimenticias.
Según el funcionario Carlos Augusto Nogueira Pinto, titular de la decimosexta Comisaría de Policía, Romario durmió poco y pasó la noche y la madrugada conversando con sus compañeros de celda.
Durante la noche del martes un amigo del ex delantero le llevó comida, pero no le permitieron recibir alimentación especial. En el 2004, Romario ya había sido detenido por problemas en el pago de la pensión alimenticia a los dos hijos que tuvo con Mónica Santoro.
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