El número de mujeres que presentó una denuncia por violencia de género y, posteriormente, renunció a continuar con el proceso judicial ha aumentado un 46,4 por ciento desde 2007.
El número de mujeres que presentó una denuncia por violencia de género y, posteriormente, renunció a continuar con el proceso judicial ha aumentado un 46,4 por ciento desde 2007.
Así, de las 470.706 denuncias presentadas desde enero de 2007, ha habido 58.118 renuncias al proceso, lo que supone un 12 por ciento del total, como muestran las estadísticas del Observatorio de Violencia Doméstica y de Género, que ha presentado hoy su presidenta, Inmaculada Montalbán, en relación con la aplicación de la ley de violencia de género.
Si en 2007, 2.735 mujeres renunciaron a seguir adelante con la denuncia, en 2010 han sido 4.004.
Montalbán mostró su preocupación por el aumento de estas renuncias y explicó que se deben al derecho que tiene la víctimas a no declarar, lo que se traduce en el sobreseimiento o el archivo del caso, puesto que el
testimonio de la mujer “es vital” para llegar al fin del proceso.
La presidenta del Observatorio consideró que estas renuncias pueden deberse a que las mujeres “no ven cumplidas sus expectativas”, en el sentido de que el proceso es más complejo y duro de lo que pensaban.
No obstante, las 470.706 denuncias por violencia de género presentadas desde 2007, suponen un aumento del 17 por ciento, ya que en ese año hubo 126.293; en 2008, 142.125; en 2009, 135.540; en tanto que en el primer semestre de 2010 se han contabilizado 66.748.
Montalbán, que también hizo un balance de la respuesta judicial en los últimos cinco años, aseguró que ésta “ha mejorado” y se mostró convencida que la ley de violencia de genero ha salvado “muchas vidas”.
Indicó que desde que existen los juzgados de violencia sobre la mujer, en 2005, se han dictado 140.936 órdenes de protección, un 73 por ciento de las solicitadas.
En este sentido, señaló que las mujeres que han muerto en estos últimos cinco años por violencia de género y que contaban con orden de protección en vigor han sido “sólo” 47.
Insistió en que “no hay impunidad para los maltratadores”; de hecho, el 79,5 por ciento de las sentencias de los juzgados especializados en violencia machista han sido condenatorias, las dictadas por los juzgados de lo penal que conllevaron la condena fueron el 53 por ciento.