Se trata según el responsable municipal de Fomento de “la apuesta más importante hecha hasta el momento por el Ayuntamiento y los propios hosteleros para garantizar el mantenimiento y el desarrollo futuro de este sector, clave para la economía de Chiclana”. Asimismo, resaltó que “la mejora de la calidad es una autoexigencia de los propios empresarios, conscientes de la gran competencia que existe”. En este sentido, Lechuga señaló que la promoción de los productos locales “tiene que ser un punto clave en la estrategia de estas empresas”.
De esta manera, el citado plan recoge las acciones que se deben afrontar para mejorar la calidad de las empresas dedicadas a la restauración, bares, cafeterías y hostelería, con el objetivo principal de aumentar la satisfacción de los clientes, lo que permitiría alcanzar el liderazgo provincial no sólo en el número de camas, sino también en oferta complementaria y enogastronomía.
Para poder acceder a este sello de calidad, las empresas hosteleras locales deberán cumplir unos requisitos mínimos, que serán establecidos y controlados por una empresa auditora externa. Quienes cumplan estos requisitos podrán lucir en sus establecimientos el sello con el lema “Calidad en Hostelería”. Para Lechuga, “la manera más eficaz de asegurar la supervivencia de estas empresas es apostar por la calidad, ofrecer al cliente un servicio diferente, mejor, que el que puedan dar establecimientos de otras zonas”.
Para Jose María Ortega, responsable de la empresa Consulting, encargada de la citada auditoría, “este sello de calidad es una garantía para el cliente”. Los establecimientos hosteleros de la ciudad serán analizados por técnicos de esta empresa, que determinarán el estado actual de los mismos, así como los puntos en que deben mejorar para poder optar al citado sello.
Por su parte, Francisco Vela, presidente de los hosteleros de Chiclana, puso de relieve la necesidad de que este sector tenga los mejores establecimientos de la provincia, “la hostelería de Chiclana tiene que estar en primera división”.
Las áreas de mejora que se establecen en el plan de calidad del sector hostelero comprenden los recursos humanos, las instalaciones y equipamientos, la gestión comercial de los establecimientos, y la atención al cliente, “dentro de un proceso de innovación y mejora continua”, señaló el delegado de Fomento.