El Ayuntamiento de Conil ha decidido poner freno a la proliferación de despedidas de solteros. Las molestias que causan a los vecinos, el incumplimiento de la ordenanza de Medio Ambiente y la sospecha de que algunas empresas de manera ilegal albergan este tipo de eventos, ha obligado al Administración local a actuar.
Es por ello, que el Consistorio conileño inicia una campaña de control a los organizadores de estas celebraciones, que se completará con un seguimiento de los establecimientos que las acogen. Asimismo, desde el Gobierno local informan que "va a ser implacable" contra aquellos que no cumplan la referida ordenanza.
Las medidas fueron anunciadas por el concejal de Seguridad Ciudadana, Manuel V. Alba quien puso de manifiesto que "se trata de un problema no muy extendido que se genera en algunos inmuebles y establecimientos, pero que causa molestias a los vecinos".
Denuncia a la Agencia Tributaria
El edil anunció también que en aquellos inmuebles "donde sea requerida la Policía Local por los vecinos, con motivo de ruido o escándalos que perturben el descanso, independientemente de abrir expedientes sancionadores", se pondrán los hechos en conocimiento de la Agencia Tributaria "para que requiera los contratos de alquiler y comprobar si se está incurriendo en una irregularidad".
También el concejal, puso de manifiesto, que por parte de la Policía Local se han realizado más de noventa denuncias a personas por consumir bebidas en la vía pública. Este tipo de denuncias conlleva sanciones de 300 euros.