El periodista cordobés Álvaro Vega ha publicado el que ya es su tercer ensayo, titulado 'El pato que se hizo andaluz', en el que analiza cómo fue posible recuperar, desde la provincia de Córdoba, una especie de ave acuática en peligro de extinción, la malvasía, lo cual se ha logrado, tras un trabajo de casi cuatro décadas, que aún continua, y gracias a destacadas acciones individuales y a la implicación de la Junta de Andalucía.
En declaraciones a Europa Press, Álvaro Vega ha explicado que, tal y como recoge en su libro, editado en formato digital por la compañía sevillana RD Editores, "en 1977 sólo existían 22 malvasías en Europa Occidental. Se habían refugiado en la laguna cordobesa de Zóñar, en el término municipal de Aguilar de la Frontera, el único humedal andaluz que reúne las condiciones para ser tenido como un lago natural".
Ahora la situación es bien distinta, pues, según ha destacado el autor del ensayo, "el último informe anual sobre la malvasía cabeciblanca situaba en 2.175 los ejemplares que existían a finales de 2013 en 115 humedales de 16 provincias, pertenecientes a seis comunidades autónomas, Andalucía. Castilla-La Mancha, Castilla y León, Madrid y la Comunidad Valenciana".
La génesis que ha permitido la preservación de esta especie singular, cuya procedencia se sitúa en Siberia y que fue avistada por primera vez en España en 1871, en concreto junto a Sanlúcar de Barrameda (Cádiz), y el hábitat que lo hizo posible, los humedales del Sur de la provincia de Córdoba, son el objeto principal de este ensayo de Álvaro Vega, que será presentado este próximo martes por la consejera de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía, María Jesús Serrano.
El trabajo, según ha aclarado el periodista cordobés, no es solo un recorrido por los avatares de la malvasía y las lagunas cordobesas a lo largo de los últimos 40 años, sino que aspira, según ha comentado su autor, a ser "una aproximación a la capacidad de la persona de hacer política para cambiar la realidad desde unos parámetros éticos y de compromiso".
En este sentido, para Álvaro Vega, "la malvasía simboliza la validez de la política y el autogobierno, ya que su evolución ha sido posible gracias la decisión y el trabajo de un grupo de personas, precursoras del ecologismo en Andalucía a finales de la década de los 70 del siglo pasado, y por el compromiso medioambientalista posterior de la Junta de Andalucía", esta es la razón, según ha subrayado, "por lo que hoy podemos hablar de la malvasía en presente y de las lagunas cordobesas como unos humedales que no pasaron a ser una tierra más de cultivo".
Frente a la idea de la política, que ahora buena parte de la ciudadanía percibe como uno de sus principales problemas, 'El pato que se hizo andaluz' defiende que "es precisamente la actividad pública, promovida desde la sociedad, la que permite participar en su construcción día a día".
El ensayo recoge el testimonio directo de una parte de los protagonistas de la historia, desde su visión personal, mientras que otros han aportado datos y documentos, algunos de ellos inéditos hasta ahora, "y todos han puesto de manifiesto que el camino recorrido no ha sido nada fácil", según ha detallado Vega.
El trabajo incluye cerca de dos centenares de fotografías, documentos e ilustraciones de todo el proceso, que se pueden consultar en Internet en la página web del autor, 'www.alvarovega.es'.
Este es el cuarto libro de Álvaro Vega. Tras su novela 'El letargo de Abudia' (2006), público dos ensayos, 'El papel de la prensa en Córdoba durante la II República' (2006) y 'Provincializar no existe pero funciona' (2007), este último junto a la también periodista cordobesa Mercedes Martínez.