El coronavirus y el confinamiento que trajo consigo para toda la población, y con más motivo para las personas mayores, han sido tenido una influencia perjudicial en los pacientes que sufren alzheimer.
Esta enfermedad neurodegenerativa, para la que no existe una cura, requiere de una detección precoz para neutralizar sus efectos. Algo que en este periodo no ha ocurrido.
Y es que el temor a una posible infección de coronavirus ha provocado que muchas personas de la tercera edad no hayan seguido el protocolo habitual de diagnóstico, de manera que han tardado más tiempo de lo habitual en consultar los posibles indicios del inicio de la patología o se han hecho pruebas más tarde de lo recomendable por el simple hecho de no ir al hospital.
A pesar de ello, el Hospital Reina Sofía de Córdoba sigue siendo el que cuenta con los tratamientos más innovadores de toda Andalucía y de última generación para abordar la enfermedad.
Este complejo sanitario de referencia atiende más de un millar de consultas anuales y diagnostica unos 500 nuevos casos. Datos que hay que poner de relieve en un día como el de hoy, el Día Mundial del Alzheimer. Una fecha que, nunca mejor dicho, a nadie se le debe olvidar.