"Un día muy duro para el Albacete" por la muerte de Novo

El vicepresidente del Albacete, Víctor Varela, ha comparecido en las instalaciones de la Ciudad Deportiva ‘Andrés Iniesta’ para mostrar el dolor por el fallecimiento de Pelayo Novo, exjugador del conjunto albaceteño, y ha dicho que “es un día muy duro para la familia del Albacete”.

“A nivel personal es una terrible pérdida y solo podemos tratar de arropar a la familia, acompañarles e intentaremos rendirle un homenaje a una persona que, aunque estuvo poco tiempo con nosotros, era muy querida aquí”, ha dicho.

Varela ha añadido que “le teníamos una estima y un cariño muy especial”, y ha reiterado su mensaje de “fuerza y ánimo” para su familia, pareja y “los muchos amigos” que tenía en el fútbol, además de para “la familia del Real Oviedo, el club al que seguía vinculado, que me consta está pasando por un mal momento tras conocer la noticia”.

El exjugador ovetense, de 32 años, formó parte de la primera plantilla manchega en la temporada 2017-18 en la que sufrió el accidente que le apartó del balompié nacional tras precipitarse de una altura de tres pisos en un hotel de concentración en Huesca.

En representación de la plantilla blanca ha comparecido esta mañana Manu Fuster, quien ha querido dar el pésame a la familia y amigos de Pelayo en nombre del vestuario, incidiendo en que, aunque no lo conoció, “me ha llegado de primera mano que era una magnífica persona y un futbolista espectacular”.

El Albacete ha anunciado que este domingo, en el partido que disputará en el Carlos Belmonte frente al Sporting, se guardará un minuto de silencio en memoria de Pelayo Novo y sus jugadores portarán un crespón negro en señal de luto.

Pelayo Novo ha fallecido este lunes tras ser arrollado por un tren en la capital asturiana, donde había vuelto al deporte tras una caída que le hizo cambiar el fútbol por el tenis silla y donde estaba vinculado también a la Fundación del club oviedista.

Formaba parte de la junta directiva de la Federación Asturiana de Tenis y había vuelto a la competición gracias al tenis silla tras recuperarse de una caída que, siendo aún futbolista del Albacete, le obligó a pasar por el Hospital de Parapléjicos de Toledo.