Los trastornos más violentos han estallado en el antiguo barrio de Bab El Oued, a diez minutos del centro de Argel, donde las huellas de los enfrentamientos y los destrozos eran todavía visibles, según pudo constatar EFE.
A primera hora de la noche, cientos de jóvenes tomaron las calles de este barrio y rodearon la comisaría para
denunciar la escalada de los precios y el importante alza de productos de gran consumo, como el azúcar y el
aceite.
La policía se ha visto desbordada y no ha podido contener la cólera de los manifestantes, algunos de los cuales han aprovechado para romper tiendas de productos electrónicos, de ropa o de telefonía.
Armados con barras de hierro y con diversas armas blancas, entre ellas espadas de fabricación casera, los alborotadores se han enfrentado a la policía durante largas horas, que ha usado material antidisturbios para dispersarles, informaron testigos presenciales y habitantes del barrio.
Los enfrentamientos han durado parte de la noche y han provocado numerosos en ambos bandos, y la llegada de refuerzos policiales no ha logrado calmar los ánimos.
EFE ha podido comprobar, a primera hora de esta mañana, cómo importantes efectivos de unidades antidisturbios tomaban el barrio de Bab El Oued y un helicóptero sobrevolaba la zona.
Episodios de cólera similares se han producido también, en otros barrios de Argel, como Cheraga, Bouchaoui o Ain Benian.