Los jefes de Estado y de Gobierno de la UE iniciarán la renovación de los altos cargos de la UE durante una cumbre extraordinaria que se celebrará en Bruselas la noche del 27 de mayo, apenas dos días después de que se conozcan los resultados de las elecciones a la Eurocámara, en las que los principales grupos políticos han presentado candidatos a presidir la Comisión.
La rapidez en la convocatoria, orquestada por el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, permitirá a los líderes europeos recuperar la iniciativa en la elección del sustituto de José Manuel Durao Barroso al frente del Ejecutivo comunitario. Pero también podría provocar ya el primer enfrentamiento de los jefes de Estado y de Gobierno con el nuevo Parlamento.
En su carta de invitación a los jefes de Estado y de Gobierno de los 28, Van Rompuy explica que el objetivo de la cumbre es "discutir los resultados de las elecciones y examinar qué podemos aprender de ellos". "Será muy pronto para decidir sobre nombres", resalta el político belga.
Ya el pasado fin de semana había dicho que no es seguro que uno de los cinco candidatos presentados por los grupos políticos --el luxemburgués Jean-Claude Juncker, por el PP europeo; el alemán Martin Schulz, por los socialistas; el belga Guy Verhofstadt, por los liberales; la alemana Ska Keller y el francés José Bové por los Verdes; y el griego Alexis Tsipras por Izquierda Unitaria- vaya a ser el nuevo presidente de la Comisión. Los líderes podrían optar por un candidato tapado en el último minuto.
En la cumbre del 27 de mayo, los jefes de Estado y de Gobierno examinarán los resultados electorales y, aunque no está previsto que discutan ya sobre nombres, sí se espera que den las primeras señales de si aceptarán al candidato del Parlamento que reúna más apoyos o buscarán alternativas. El mismo día, los presidentes de los grupos políticos celebrarán su primera reunión tras los comicios.
Según el Tratado, son los líderes europeos los que deben designar por mayoría cualificada al candidato al cargo de presidente de la Comisión, pero "teniendo en cuenta" el resultado de las elecciones a la Eurocámara. Después, el candidato debe ser confirmado en el Parlamento por mayoría.
ELECCIÓN DEL PRESIDENTE DE LA CE, EL 26 Y 27 DE JUNIO
La elección del nuevo presidente del Ejecutivo comunitario está prevista en la cumbre del 26 y 27 de junio. Hasta entonces se celebrarán las diferentes reuniones constitutivas de los nuevos grupos políticos, así como varios encuentros entre los líderes de los partidos políticos y negociaciones entre la Eurocámara y Van Rompuy para encontrar a un candidato de consenso.
Sin embargo, la elección del sustituto de Durao Barroso no se abordará aisladamente, sino que formará parte de un paquete de altos cargos de la UE. Ello obligará a los líderes europeos a tener en cuenta no sólo el resultado de las elecciones europeas sino también los equilibrios entre norte y sur, entre las diferentes familias políticas y también entre hombres y mujeres.
Además de al presidente de la Comisión, los líderes europeos tienen previsto designar en junio al Alto Representante para la Política Exterior, que sustituirá a Catherine Ashton; al nuevo presidente del Consejo Europeo, ya que el mandato de Van Rompuy expira el 30 de noviembre; y también al presidente a tiempo completo del Eurogrupo, cargo al que opta el ministro de Economía, Luis de Guindos. Una vez que el Consejo Europeo haya presentado su propuesta para el Ejecutivo comunitario, se abrirá un periodo de negociaciones con el Parlamento sobre su programa y prioridades políticas.
NUEVO PRESIDENTE DE LA EUROCÁMARA, EN JULIO
El nuevo Parlamento Europeo salido de las elecciones del 25 de mayo celebrará su sesión constitutiva del 1 al 3 de julio, durante la cual se elegirá al nuevo presidente que sustituya al socialista Martin Schulz y a los vicepresidentes. En la actual legislatura, el PP europeo y los socialistas alcanzaron un acuerdo para turnarse en la presidencia dos años y medio cada uno. Durante las primeras semanas de julio se constituirán las diferentes comisiones parlamentarias.
La elección del presidente de la Comisión se votará en sesión plenaria el 16 de julio. El candidato necesitará la aprobación de la mayoría de los eurodiputados, es decir, la mitad más uno de los 751 que saldrán elegidos en mayo (un total de 376). El voto será secreto. En caso de que el candidato no obtuviese la mayoría necesaria, el Consejo Europeo, pronunciándose por mayoría cualificada, tendría un mes de plazo para proponer a un nuevo candidato.
Una vez elegido el nuevo presidente del Ejecutivo comunitario, los Estados miembros deberán designar durante el verano a sus respectivos comisarios. Se espera que el representante español sea el candidato del PP, Miguel Arias Cañete. El presidente de la Comisión es el responsable de distribuir las carteras, aunque el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, ha dicho que España aspira a la cartera de Asuntos Económicos o la de Comercio.
CANDIDATOS A COMISARIO, EN SEPTIEMBRE Y OCTUBRE
Durante los meses de septiembre y octubre, la Eurocámara examinará a los 28 candidatos a comisario durante una serie de audiencias públicas en las respectivas comisiones parlamentarias. Posteriormente, cada comisión parlamentaria se reunirá a puerta cerrada para evaluar las competencias y conocimientos del candidato. Esta evaluación escrita se enviará al presidente del Parlamento. En el pasado, estas audiencias han llevado a algunos de los comisarios designados a retirar sus candidaturas o a cambiar de cartera.
Una vez concluido el proceso, el presidente de la Comisión presentará al Colegio de comisarios y su programa en una sesión del Parlamento, que si no hay percances será la de octubre. Todos los miembros del colegio deben ser aprobados entonces por el pleno en una votación única. El nuevo Ejecutivo comunitario empezará así a funcionar, si no hay retrasos, el 1 de noviembre.