Según se confirmó desde el Consistorio murciano, tanto el detenido, como la víctima, vecina de Alcantarilla, eran pareja y convivían juntos. Sobre posible antecedentes de maltrato, se subrayó que tanto en la Policía Local, como en la Policía Nacional y los propios Servicios Sociales, “no se tenía conocimiento alguno de que la víctima hubiera denunciado” en anteriores ocasiones.
El individuo fue detenido cuando iba por la calle por la Policía Local y en su comparecencia posterior ante los agentes manifestó que había sido él el autor de los hechos y que convivía con ella. La Policía comprobó in situ como el detenido insultó a su pareja.
Por todo ello, desde el Ayuntamiento de Alcantarilla se condenó este nuevo caso de violencia de género, el tercero que en menos de un mes se registra en el municipio, y se mostró el deseo de que “las administraciones pongan al servicio de los ciudadanos todos los medios a su alcance”, y pidió que no vuelvan a suceder hechos tan “lamentables”.
Pese a todo, el Consistorio alabó la rapidez con la que actuaron los miembros de la Policía Local, ya que “al segundo de haber pasado este triste suceso estaban allí”. En este sentido, se destacó que se “ha hecho un gran esfuerzo en el gasto para que se tengan más agentes a disposición de los ciudadanos y que queda plasmado en este tipo de acontecimientos”.
Los hechos ocurrieron el martes, sobre las 21.14 horas, cuando el Teléfono Único de Emergencias 112 recibió una llamada que alertaba de que un individuo había apuñalado a una mujer y se solicitaba urgentemente una ambulancia. Al lugar acudieron efectivos de la Policía Local de Alcantarilla, así como una Unidad Médica Emergencias (UME) que atendió in situ a la herida y la trasladó al Hospital Virgen de la Arrixaca. Según informaron fuentes del citado centro hospitalario, la víctima fue dada de alta ayer.
Tercer caso en un mes
Con este nuevo episodio de violencia doméstica, son ya tres los casos registrados en el municipio de Alcantarilla de estas características en menos de un mes. Así, el primero de ellos ocurrió el pasado uno de octubre, cuando un militar mató a una joven brasileña con la que mantenía una relación sentimental, e hirió de gravedad a la amiga de ésta. Las dos chicas se conocían, ya que trabajaban en el mismo club, y el militar tenía antecedentes por maltrato a su ex mujer, aunque su pareja sentimental, la brasileña fallecida, nunca lo había denunciado por ese motivo.
Cinco días después se produjo un nuevo caso de violencia doméstica, esta vez en el interior de un hipermercado situado en la calle Mayor del municipio, cuando el ex novio de una empleada entró al interior del supermercado con la intención de agredirla con un cuchillo; acción que fue abortada por la intervención de uno de los compañeros de la víctima.