Los concejales del Partido Socialista, Opción Sampedreña e Izquierda Unida se hacen las víctimas, en opinión del Gobierno municipal del Partido Popular. El “papel” que, asegura el Ejecutivo local, representan forma parte de una estrategia que califica de “juego sucio”.
“Pocos ayuntamientos pueden decir que la oposición tiene tanto espacio, con casi 50 propuestas debatidas en pleno por cada año de legislatura”, remarcó Romero, quien contrapuso este tratamiento por parte del Equipo de Gobierno “a la lamentable actitud que tiene la oposición, que se ha instalado en la crispación y que se está especializando en alterar el funcionamiento de los plenos con una actitud que degrada la imagen de la política”.
La última trifulca que rompió la paz del Pleno ordinario de mayo fue una de las más graves que ha vivido la corporación. Una disputa por el turno de palabra entre el portavoz municipal y el concejal de Opción Sampedreña, Rafael Piña, que terminó con el desalojo por la fuerza de éste último.
Piña se refirió al Reglamento de Ordenamiento Interno del Ayuntamiento y leyó el artículo 94. A este artículo se aferró para argumentar que "estaba en su derecho" para reclamar su turno de palabra.
Romero y Piña coincidieron en desear que una situación como ésta no vuelva a repetirse.