La Guardia Civil ha detenido a una mujer y un hombre, de 21 años de edad, vecinos de los municipios granadinos de Atarfe y Albolote, respectivamente, como presuntos autores de dos delitos de hurto continuado de joyas valoradas en más de 12.000 euros, en dos domicilios del municipio de La Zubia (Granada), en los que ella trabajaba como limpiadora junto a su madre.
En una nota, la Institución Armada ha explicado que la mujer acudía con su madre a diario trabajar como empleada de hogar a dos domicilios de una urbanización y aprovechó esta circunstancia para ir apoderándose poco a poco de todas las joyas que guardaban los propietarios de estas viviendas.
Los agentes iniciaron la investigación el pasado 1 de septiembre cuando la propietaria de la primera vivienda denunciara que se le habían sustraído del interior de un joyero que guardaba en el armario del dormitorio, varias joyas y un reloj de oro macizo valorados en aproximadamente 10.000 euros, las cuales había visto por última vez un mes antes.
En la denuncia, la propietaria explicó que no había nada forzado en la vivienda y que no sospechaba de nadie a pesar de que recientemente habían estado trabajando en su casa unos pintores y que una mujer y sus hijas trabajan desde hace 15 años en la limpieza de su domicilio.
Posteriormente, las investigaciones de los agentes tras este primer hurto dieron como resultado la detención de la pareja, además de averiguar que habían vendido las joyas en distintos establecimientos de compraventa de oro de la capital granadina y los municipios de los que procedían ambos. Así, los agentes incluso han recuperado algunas de las joyas sustraídas.
Tras la detención de ambos jóvenes por el primer hurto, la Guardia Civil ha averiguado que la detenida presuntamente acompañaba a su madre a trabajar en un domicilio cercano y que a los propietarios también les habían sustraído joyas valoradas en 2.000 euros, las cuales fueron vendidas en dos establecimientos de compraventa de oro de La Zubia y Granada entre los meses de julio y septiembre.
Finalmente, ambos detenidos han reconocido los hechos investigados y han admitido que se gastaron el dinero conseguido en ropa y en abonos para un club de fútbol granadino. Aún así, ambos jóvenes han entregado un valioso anillo sustraído en esta última vivienda a los agentes.