El Ayuntamiento de Punta Umbría ha adjudicado este lunes el contrato para la limpieza y el mantenimiento de los imbornales y sumideros de las calles de la localidad. Así, la empresa Saytra Servicios Integrales Sl será la encargada de realizar estas labores por un importe de 5.100 euros, IVA excluido.
El alcalde, José Carlos Hernández Cansino, ya adelantó que se trata de una actuación “previsora, que antecede a las lluvias y se realiza incluso un poco antes que en los últimos años, para evitar riesgos de posibles acumulaciones de aguas cuando lleguen las precipitaciones del otoño”.
El contrato consiste en la limpieza y mantenimiento de los imbornales y sumideros en las diferentes vías de Punta Umbría y El Portil, como plan de choque para prevenir los posibles afectos adversos provocados por las lluvias venideras. Los trabajos serán coordinados por la Concejalía de Mantenimiento de Vías Públicas.
El mencionado servicio será prestado con medios humanos y mecánicos. En este sentido, la empresa aportará un camión de aspiración/impulsión de 18 toneladas con cuba de 9.000 litros de capacidad, con la equipación necesaria para realizar el servicio, esto es, manguera de absorción, lanza y pistola. A este camión se sumará un furgón con equipo de impulsión para las zonas asfaltadas y aquellas a las que no pueda acceder el camión. El equipo se completará con dos operarios especialistas, con más de diez años de experiencia en trabajos similares.
La limpieza debe hacerse antes de que transcurra un mes desde la fecha de formalización del contrato y completará, al menos, 600 imbornales/sumideros, con lo que se mejora en 200 la ejecución obligatoria.
Para el regidor municipal, “mantener limpias las alcantarillas es esencial para que puedan drenar correctamente, sobre todo en zonas que habitualmente son susceptibles de presentar problemas ante encharcamientos”.
Este mantenimiento de las redes de saneamiento de Punta Umbría abarcará todas las zonas del municipio, incluido el núcleo urbano de El Portil.
La limpieza consistirá en la eliminación de lodos, hojas y restos de sedimentos en los imbornales, con objeto de prevenir posibles obstrucciones. Se evita, así, que ante precipitaciones intensas ese material sea arrastrado hasta las rejillas, colapsando las entradas e impidiendo el normal funcionamiento del desagüe.
