El ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, ha afirmado este viernes que "nadie" ha enviado al Gobierno el nuevo proyecto sobre el dragado del Guadalquivir que, según ha dicho, "no se puede hacer automáticamente", ya que habría que estudiar antes las pretensiones de la Autoridad Portuaria de Sevilla y las "condiciones técnicas" necesarias en su caso.
Así lo ha indicado en Jaén antes de su visita a la XVI Feria Internacional del Aceite de Oliva e Industrias Afines, Expoliva 2013, y a preguntas de los periodistas sobre esta nueva iniciativa y su remisión al Ejecutivo central.
"Ni se ha enviado un nuevo proyecto por parte de nadie del dragado del Guadalquivir ni en este momento el dragado podría hacerse porque en su momento, cuando la anterior declaración de evaluación ambiental se hizo, estaba sujeto a unas condiciones técnicas muy rígidas", ha apuntado el ministro, quien ha añadido que se establecieron con el objetivo de garantizar los cultivos y que "el entorno de Doñana no se degradara".
En este sentido, ha explicado que, actualmente, lo que se está viendo es, "si a la vista de lo que pretendan hacer las autoridades portuarias de Sevilla, procede o no una nueva declaración de impacto ambiental y cuáles serían las condiciones técnicas".
"No se puede hacer automáticamente porque la realización de un dragado sin ningunas correcciones técnicas produciría perjuicios al entorno de Doñañana y perjuicios a los cultivos de la zona, que se salinizarían por efectos del avance, de la facilidad que tiene el tapor salino de ir aguas arriba", ha incidido Arias Cañete.
El pasado 16 de abril, el Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria de Sevilla tomó conocimiento del proyecto constructivo del dragado de profundización de la Eurovía Guadalquivir, con carácter previo a su remisión a Puertos del Estado --que debe emitir informe preceptivo sobre el mismo--, iniciándose así la tramitación de la iniciativa, ante la que han surgido voces en contra por su posible impacto.