El Rectorado de la Universidad de Sevilla (US) ha trasladado respuesta a las propuestas de la Defensoría Universitaria de la institución académica que se centran en la tesitura que vive un sector del alumnado de la sede académica como consecuencia de la afección de la crisis a la situación de sus núcleos familiares, entre las cuales se encuentra la devolución de tasas en los casos en los que se requiera una anulación de matrícula por causa "grave de fuerza mayor".
La Defensora Universitaria de la Hispalense, Rosa Muñoz, ha confirmado en este sentido a Europa Press que la US recalca que no se ha dado hasta ahora ningún caso excepcional de estudiante en circunstancias especiales al que no se haya atendido, en un compromiso que se mantendrá en el futuro.
No obstante, la Hispalense sí alude al estudio de otras vías de futuro, referidas a cambios normativos, que puedan redundar a una mejor atención a este colectivo. En este sentido, el propio rector de la institución, Antonio Ramírez de Arellano, ya recordó a Europa Press que hay que tener en cuenta las "limitaciones" sobrevenidas por el hecho de que es la Junta de Andalucía el ente que en última instancia ostenta las competencias en cuanto a la normativa que regula las tasas universitarias.
Según datos del Vicerrectorado de Estudiantes, la US ha detectado una bolsa de alumnos que abandonan por impago, bien por dificultades económicas o por agotar convocatoria: el número es "bajísimo" y no llega al 1 por ciento de los 60.000 estudiantes de la Hispalense, pues el curso pasado "no llegaron a 700" --en el 2012-13 hubo unos 1.000--, y con las medidas implantadas en este curso, fundamentalmente el fraccionamiento de pago, se espera que ese número "baje todavía más y se salve a la gente que no pagaba porque no tenía medios".
Con todo, se muestra que por ahora la "dramática" situación económica de las familias como consecuencia de la crisis hace "mella" en el estudiantado, según la Defensora Universitaria, que alude a que tampoco han contribuido a paliar este escenario las políticas desplegadas por las administraciones.
RESERVA DE PLAZAS
Por ello, recuerda la Defensoría de la US, en los dos últimos años los estudiantes de la Hispalense han perdido 14 millones de euros por el cambio en la política de concesión de becas del Ministerio, por lo que son más de 27.000 los estudiantes de la Universidad de Sevilla que se han acogido al pago fraccionado de la matrícula en cinco plazos y, más de 6.000 los alumnos que optaron a 2.122 becas --el triple de demanda que de oferta-- del plan propio de ayudas.
La Defensoría declara que no es "ajena" a esta realidad y por eso, ante las peticiones de amparo que ha recibido en relación a las normas de anulación de matrícula, elevó una propuesta a fin de evitar perjuicios económicos "graves" a estudiantes que se vean abocados a anular su matrícula académica.
En dicha sugerencia, y tras cotejar las normativas de otras universidades andaluzas, la Defensoría remarcaba que es de justicia establecer en la normativa de la sede universitaria una fecha límite para la presentación de solicitudes de anulación de matrícula para asignaturas anuales y cuatrimestrales. Además, y de manera excepcional, el órgano entendía que el Rectorado tendría que atender anulaciones de matrícula fuera de estos periodos siempre y cuando haya causas debidamente acreditadas y las asignaturas no hayan sido evaluadas.
Del mismo modo, la Defensora sostenía en su sugerencia que cuando concurran causas graves de fuerza mayor podría acordarse, a propuesta del rector o persona en quien delegue, la devolución total o parcial de las tasas abonadas.
Por último, el ente manifestaba que si el estudiante que pide la anulación de la matrícula pertenece a un grado con límite de admisión se le debería reservar la plaza para el siguiente curso académico y de tal manera que su anulación no supusiera un recargo de la matrícula en el curso siguiente.