Iván Dorado, un artífice joyero vecino de Sevilla ha creado y patentado un sistema de persianas que impide que los niños puedan caer a la calle desde su casa, mediante un artilugio que se coloca en unos segundos y que se despliega al mismo tiempo que se abre la persiana de las viviendas.
Se trata, como ha explicado a Efe, de un ingenio que sacó adelante tras tener él mismo una mala experiencia con su bebé, que le dio “un buen susto” un día cuando se acercó a una ventana de su casa, en una sexta planta, por lo que comenzó a pensar en la forma de evitar sucesos graves sin un coste e instalación importantes.
De esta forma, nació ‘Secupeke’, un dispositivo de seguridad desmontable que se acopla a la mayoría de persianas del mercado, “y que es una alternativa a las rejas, que muchas veces son un arma de doble filo, al impedir evacuaciones en casos necesarios”.
Dorado recuerda que nada más sufrir el “susto” que le dio su bebé “me puse a pensar, y comenzaron meses de desarrollo y mejor del prototipo inicial, cambios de materiales y diseños”, hasta que encontró el sistema definitivo, que instaló en el dormitorio del niño como primer lugar.
En esencia, se trata de un elemento paralelo a la persiana que se instala en segundos en la base de la ventana, y que hace que cuando se levanta se levante asimismo el sistema, que permite la entrada de luz solar sin problemas, con la separación de nueve centímetros entre sus baldas, pero impide que un niño lo pueda atravesar y caer.
En caso de necesitar salir de una vivienda de forma apresurada, el sistema se desmonta en segundos, y no impide que la ventana pueda ser una vía de escape.
El primer prototipo fue creado hace dos años, y ahora cuenta con patente de ámbito nacional, pendiente la certificación a nivel mundial.
Su idea ha obtenido el primer premio Inventors Pitch Awards 2018 y el premio Talento LAB de la Fundación Cajasol, y está en situación de preventa, a través de una campaña de crowdfunding, con la previsión de que en marzo se comiencen a vender los primeros sistemas.
