Vanesa, Mercedes y 22 mujeres más abren cada mañana los
Centros Integrales de Atención a la Mujer (CIAM), dependientes del Ayuntamiento de Sevilla. Desde hace meses, estructuras como éstas copan el debate político y social como consecuencia de la irrupción de un discurso que cuestiona la
necesidad de este tipo de servicios públicos.
Vanesa Casado acumula 20 años de trayectoria profesional en temas de mujer y los últimos seis años de esas dos décadas de trabajo especializado los ha desarrollado a pie de obra como asesora jurídica del
CIAM del Polígono Sur. “Los discursos que cuestionan la necesidad de estos recursos públicos están fuera de la realidad. No se apoyan en datos sino en prejuicios.
Las estadísticas hablan por sí solas”, sentencia Vanesa, delegada de CCOO, para la que las mujeres sevillanas que sufren no sólo violencia de género, sino que tienen necesidad de asesoramiento, se merecen una “respuesta desde lo público”.
Su compañera
Mercedes Borrego, trabajadora social en el
CIAM de Casco Antiguo, pide “salir del armario” y “formar en feminismo”, sinónimo de formar en “igualdad”. No sólo a las mujeres, que por supuesto, sino a los hombres, apunta. Esta formación es, además, urgente, ya que el acceso a internet y las redes sociales “han hecho aún más compleja la lucha contra la violencia de género”. “La demanda de atención en los CIAM por violencia de género no deja de crecer y lo preocupante es que está apareciendo en chicas cada vez más jóvenes que, además, no encuentran apoyo en sus grupos de amigos”, explica Mercedes.
I.L (prefiere guardar el anonimato) ha trabajado durante tres años como psicóloga en uno de los CIAM de Sevilla. Se lamenta de que sobre violencia de género, igualdad y mujer hable “cualquiera”. “
Se está trasladando información tergiversada y falsa. Deben hablar los especialistas”, defiende. “Los discursos que andan circulando están generando mucha confusión y las personas a las que nosotras atendemos en los CIAM ya están lo suficiente confusas y desestabilizadas” como para tener que sufrir este tipo de ataques.
Vanesa, Mercedes y las 22 trabajadoras de los Centros Integrales de Atención a la Mujer son las obreras de la igualdad con las que cuenta el sistema público en la capital hispalense. Mujeres que se han especializado y formado para atender de manera profesional una realidad compleja y dura. Su compromiso profesional por la igualdad requiere de “más aliados”, de más estabilidad y de más rigor. Hoy, 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, habrá ocasión para reivindicarlo.