La Feria de Abril de Sevilla ha registrado su récord histórico de carruajes por las calles del Real, con 1.009, durante una jornada en la que también se agotaron por primera vez las 1.803 plazas de abonados en aparcamiento públicos y se ocuparon casi las 7.360 plazas del aparcamiento del Charco de la Pava.
Así lo ha explicado en rueda de prensa el delegado de Movilidad, Seguridad y Fiestas Mayores del Ayuntamiento de Sevilla, Juan Carlos Cabrera, quien ha insistido en la "plena normalidad" de la Feria de 2019 desde la noche del sábado y ha asegurado que el domingo hubo más afluencia de público que el mismo día del año anterior.
Una de las novedades de este año es el control de venta de bebidas en las calles aledañas a la Feria, en el barrio de Los Remedios, para evitar las "botellonas", una iniciativa coordinada con los empresarios y que está resultando un éxito, según el delegado municipal.
Este control, además de aumentar la seguridad entre los vecinos, ha permitido reducir en un 57 % la recogida de botellas de cristal y de plástico de dos litros, con 2.200 kilos menos respecto al domingo de Feria del año anterior, ha precisado Cabrera antes de indicar que se cerró un establecimiento por venta de alcohol a menores.
De los 2.474 controles de alcoholemia hechos por la Guardia Civil, solo han dado positivos 36 por la "concienciación cada vez mayor" de la ciudadanía para no conducir tras beber alcohol y por el mayor uso del transporte público, ha resaltado el delegado municipal durante el balance del Plan Especial de la Feria de Abril 2019.
Respecto al uso de los autobuses públicos, ayer domingo se transportaron a 169.000 personas, un 4,5 % más que el mismo día del año anterior, mientras que el metro bajó el 4,5 % por la incidencia de la huelga, que ya ha concluido y tras la cual se espera recuperar las cifras de años anteriores.
Los servicios de limpieza recogieron más de 175 toneladas de residuos, un 1,8 % más, con un aumento de más del 30 % de la recogida selectiva gracias al esfuerzo de los caseteros, ha señalado Cabrera.
Además, hubo 196 incidencias sanitarias, de las que 19 acabaron con un traslado a centros hospitalarios, una cifra que el delegado ha calificado como "dentro de lo normal", y se han inspeccionado 1.027 vehículos para evitar que se vendan alimentos de mala calidad.
El Ayuntamiento también ha montado un servicio especial para controlar el nivel de la música en las casetas, tres de las cuales han sido apercibidas por el "ruido ensordecedor", ha concluido el delegado.