El consejo de administración de la empresa Mercasevilla, participada por el Ayuntamiento y la sociedad estatal Mercasa y que gestiona el mercado central de abastos de Sevilla, ha aprobado este martes licitar la realización de un estudio sobre su viabilidad técnica y económica que, por un lado, defina el mejor modelo de negocio a largo plazo y, por el otro, la ubicación más idónea para sus instalaciones. Este estudio se regirá por los criterios de oportunidad económica, comercial y social y atiende a la hoja de ruta marcada en acuerdos del Pleno municipal y una vez que se garantizó su actividad sine die como empresa completamente pública.
Para establecer la ubicación más idónea y, por tanto, la conveniencia o no de un traslado de sus instalaciones, primero se ha de definir el modelo de negocio de la Mercasevilla del futuro –a cincuenta años vista–, a partir del análisis previo de las necesidades y expectativas de los clientes actuales y potenciales (incluidos todos los operadores de la cadena alimentaria y logística) y las mejores prácticas aplicadas en centrales mayoristas, polígonos o hubs agroalimentarios.
Este estudio deberá incorporar un análisis sobre los sectores inmobiliarios, los mercas nacionales e internacionales y los distintos eslabones de la cadena alimentaria. La consultora especializada que se contrate habrá de realizar un análisis DAFO (debilidades, fortalezas, oportunidades, amenazas), un análisis PEST (factores del entorno que podrían afectar a la empresa, desde los económicos hasta los políticos, pasando por los tecnológicos o sociales) y, por último, un análisis sobre posibles competencias o alianzas.
El informe y estudio de mercado valorarán sobre tres alternativas de sede: la primera, permanecer en la ubicación actual, reestructurar instalaciones y aumentar edificaciones; la segunda, coger la alternativa anterior ampliando terrenos y edificaciones, y la tercera, trasladar la actividad a otra ubicación, determinando las características mínimas y el lugar óptimo. Para cada alternativa, la consultora deberá concretar las necesidades de inversión y desinversión, así como la rentabilidad futura del negocio por flujos de caja libre a 20 años, la rentabilidad en términos de oportunidad comercial y social; la viabilidad, la fiscalidad, los trámites jurídicos y la estimación de plazos, y la fiscalidad en cuanto a las opciones de venta de terrenos. Tras este paso, se deberá realizar un análisis comparativo de los tres escenarios y plantear una propuesta de valor en un plazo máximo de seis meses.
“En suma, se trata de definir el futuro del modelo de negocio de Mercasevilla para los próximos 50 años y la conveniencia o no de trasladar sus instalaciones. A este objetivo contribuirá este informe de carácter estrictamente técnico y económico, eligiendo siempre lo mejor para la empresa y sus operadoresy fuera de cualquier enfrentamiento político. Esta ha sido la consigna del gobierno municipal al buscar la viabilidad de la empresa en los últimos años y siempre tendiendo en cuenta los acuerdos plenarios”, según ha argumentado el delegado de Economía, Comercio, Relaciones con la Comunidad Universitaria y Área Metropolitana, Francisco Páez.
Así, en el Pleno del Ayuntamiento de Sevilla de 13 de abril de 2018 se acordó el compromiso de impulsar las modificaciones urbanísticas que sean necesarias para garantizar el mantenimiento y continuidad de la actividad de Mercasevilla en su actual ubicación, o en su caso, de su eventual traslado a unas nuevas instalaciones, en función de las necesidades operativas y/o económicas para el desarrollo de su actividad.
En estos momentos, las instalaciones de Mercasevilla se encuentran radicadas en el Sector 4 del Distrito Este-Alcosa-Torreblanca. En su flanco Oeste se encuentra el Parque Infanta Elena, y por otro lado linda con el ferrocarril y el canal. La parcelas integradas en la unidad alimentaria suman una superficie de 360.730,16 metros cuadrados y se distribuye entre 257 unidades (locales, puntos de venta, cuarteladas y naves) gestionadas por unas 170 empresas.
Actividad
En el consejo de administración de Mercasevilla, la cuarta mayor central mayorista de la red de Mercas en España, también ha realizado hoy balance de su actividad “en un año, el de 2020, marcado por su papel clave a la hora de garantizar la distribución alimentaria durante el confinamiento y todo el periodo de la pandemia de la COVID-19”, ha resaltado Francisco Páez. En concreto, alcanzó un volumen de comercialización de 615,44 millones de euros, un 2,59 por ciento más que en 2019, con 361.467 toneladas de productos (2,50 por ciento más).
De frutas y hortalizas fueron 269.593 toneladas (+7,20 por ciento), de pescado y marisco 44.077 (+0,09 por ciento), de carnes, 10.379 (-0,32 por ciento) y de otros productos, 37.416 (-19,91 por ciento). La población de referencia a la que surte Mercasevilla alcanza los 2,5 millones de personas. Su amplia zona de influencia abarca las provincias andaluzas limítrofes, así como Extremadura y el Algarve portugués.