El Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona), en el marco de la operación 'Argos', ha intervenido 595 animales de compañía procedentes de la República Eslovaca introducidos en España y Portugal de forma irregular.
En el marco de esta operación la Guardia Civil ha inspeccionado a 21.340 animales de compañía en las 2.208 actuaciones que se han realizado en establecimientos dedicados a la venta de animales. Asimismo, han sido imputadas 16 personas por la venta y traslado desde países del este de Europa en vehículos inadecuados de los animales, falsificando pasaportes, certificados y exámenes veterinarios, y se han formulado 1.309 denuncias por infracciones penales y administrativas.
Las investigaciones se iniciaron al detectar animales con documentación irregular, tras haber sido adquiridos a precios muy bajos, incumpliendo las medidas sanitarias y sustituyendo, una vez en territorio español, el pasaporte que amparaba su transporte con otros documentos no válidos, llegando a falsificar su 'pedigrí' en alguna ocasión.
El Seprona estableció un dispositivo de inspección, vigilancia y control contra el tráfico ilegal de animales de compañía (especialmente cachorros de perro). Desde el inicio del mes de diciembre se vienen llevando a cabo numerosas actuaciones, inspección e intervenciones que tienen como finalidad proteger al consumidor de este tipo de fraude.
Según la Guardia Civil, las redes de delincuencia organizada que actúan en este ámbito son conocedoras de las vulnerabilidades del consumidor por su desconocimiento de los trámites y requisitos para adquirir esa mascota. Estas organizaciones aparentan tener una consolidada red de distribución con despliegue en todo el territorio nacional, aprovechando el despliegue de puntos de venta ya existentes.
Con estas inspecciones se trata también de determinar si las mascotas que se comercializan tienen correspondencia con la documentación que les acompaña, si las edades y el estado de salud son concordantes y satisfactorias y si se está adquiriendo una mascota que no haya sido sustraída a su propietario legal.
El movimiento de mascotas tiene lugar por vías terrestre, marítima y aérea. España es receptor de mascotas procedentes de otros países, sobre todo Eslovaquia, y desde España salen igualmente mascotas con destino a otros países de la Unión Europea tales como Alemania e Italia.