Los celadores del Parque de la Batería, conocidos como templetes, van a ser reparados para que “no supongan un peligro para las personas que pasan por allí, debido al desprendimiento de material”. Así lo aseguró ayer el concejal de servicios operativos, Jesús Díaz, tras ser preguntado en la sesión plenaria por el grupo municipal del PP sobre el mantenimiento de las instalaciones del parque, y después de que en redes sociales varios vecinos hayan asegurado que “se iba a producir el derribo de los mismos o incluso que se iban a llevar al desguace”, según dijo el propio Díaz.
“En ningún momento se van a quitar de allí. Y si se mueven será solo porque hay que repararlos”, dijo Díaz, quien leyó el informe de Urbanismo, firmado por el jefe de servicio y el arquitecto municipal. “Se hace una visita al lugar y se hace una inspección, de la que se informa que encuentran numerosas piezas y perfiles en avanzado estado de oxidación y con pérdidas de material. Estos generan un riesgo grave para las personas por el desprendimiento de material metálico, de vidrio y otros”, leyó el concejal.
“Así, como medida preventiva urgente, se propone clausurarlos y acotar su perímetro con al menos dos metros de separación. En cuanto a su reparación, se propone el desmontado completo de los templetes y su traslado a los talleres para que por parte de los cerrajeros municipales se evalúe la viabilidad de reparar tal cantidad de perfiles”, explicó.
No obstante, Díaz hizo hincapié en que el Ayuntamiento “intentará reparar en el mismo parque los templetes, y si se puede se hará, para no tener que moverlos”. Además, indico que, en caso de que los cerrajeros municipales no puedan arreglarlos, se consultará a una empresa externa para buscar otra solución.
Finalmente, invitó al grupo municipal del PP a que “la próxima vez que tengan una duda así, me la pregunten personalmente en vez de querer tener en redes sociales tres días de gloria. En esta ocasión nadie se ha interesado en hacerlo”.
El Parque de la Batería puede visitarse de lunes a jueves y domingos, de 9.00 a 23.00 horas. Los viernes y sábado permanecerá abierto hasta medianoche, y hasta el 1 de octubre, cuando cambiará al horario de invierno.