Es una apuesta eminentemente cultural enfocada a dar cobijo a un segmento de la sociedad sevillana que busca la relación entre personas y su acercamiento a las actividades culturales menos entendidas y reconocidas.Todos los estilos musicales tienen, en este espacio, una vía de expansión que se complementa con la posibilidad de inventar y organizar acontecimientos por los mismos usuarios de la sala.
Su coordinador de Eventos, Sergio Calvo García, es quien se encarga de filtrar las ideas y ofrecimientos que hasta la sala llegan por parte de las bandas musicales de la ciudad y de los organizadores de espectáculos y fiestas temáticas. Francisco Feria Madueño es el encargado general y su labor consiste en que todo funcione a la perfección para que los clientes se encuentren a gusto en el local.
Sergio nos comenta que la idea es ser interactivos y que están abiertos a complacer cualquier gusto. “No nos cerramos a nada y apoyaremos cualquier iniciativa que consideremos interesante, tanto musical como de espectáculos. Si un cliente me comenta que quiere hacer una actividad concreta, lo estudio, y si es viable, la realizamos”, asegura.
El local se divide en tres espacios, dos salones dedicados a actuaciones en directo y espectáculos, en los que también se pueden organizar exposiciones y todo tipo de manifestaciones culturales, y una sala denominada Dollshop que alberga un moderno bar de copas y una cabina para Djs. En ocasiones puntuales se dedica también a conciertos y fiestas temáticas.
En este formato, Museo acaba de cumplir un año de vida y se van cumpliendo las expectativas que en su día se platearon sus propietarios.La política de precios hace que no sea un lugar selectivo ya que los precios oscilan entre los dos euros para consumiciones como cerveza o refrescos y los seis euros para los combinados de alcohol. “Huimos de lo elitista y nos proponemos que nuestra sala sea asequible a todo tipo de públicos”, comenta Francisco.
