La Jarca de Manué
Abre la sesión el coro de La Viña y sobre las tablas, Manué, un Noé gaditano y arropado con 40 carpinteros dispuesto a hacer un arca para salvar las cosas más bonitas de su ciudad y “que caiga un diluvio de coplas de Carnaval”. Primer tango dedicado a Jesús Monzón, compañero desaparecido porque “San Pedro necesitaba un segunda en su coro celestial”. Segundo a las peleas entre hermandades de Semana Santa, “el Señor del Domingo de Ramos debería bajarse del paso y a esos mercaderes echarlos del templo”. Buen cuplé a Rajoy y a su lapsus linguae de “el coñazo de desfile de las FFAA”, pues si eso es una lata, “no veas si vienes a Cádiz a ver la Cabalgata”. Popurrí animal. En él, Manué mete en el arca Leones de correos, Cegatos con botas, Caballos andaluces, a El Maspapa con dos Abejitas de Ruinasa, Simios, Palomos de El Yuyu, Pollitos de mi compare y hasta Ratones Coloraos. En fin, una bestialidad.
Este año nos salimos
Sigue a continuación una genial chirigota cordobesa de Aguilar de la Frontera. Tan geniales que traen un tipo de genios salidos de una lámpara maravillosa en la que estuvieron “más apretados que tres dedos en el culo”, ¡ea! Cantan en sus cuplés con genio al genio que tiene su mujer y a cómo ahorra ésta, “que usa las compresas por los dos lados”. Tanto congeniaron los genios con el auditorio que desde el Paraíso hubo quien no pudo reprimirse y sacó de la garganta una espontánea genialidad: “Genio, búscame un trabajo fijo”.
La imposible fábrica de los sueños
Juan Fernández vuelve con esta comparsa de duendes en una Fábrica destinada a realizar sueños imposibles, duendes que también son burlones. Así, “a los que van de guapitos les concedo una novia fea; a los toreros, dos cuernos y a los banqueros, diarrea”. Pasodoble de elogio a los gaditanos, “con ganas de trabajar, gente feliz, de grande corazón y mayor pasión y que está hasta los huevos de sellar el paro”. Ponen la fábrica la pleno rendimiento para cantar la collera de cuplés, en los que un gaditano que lleva tatuado a Paco Alba en el Pecho, La Caleta en la espalda y en los brazos a La Uchi y a La Petróleo, tiene tatuado “en el nabo: Bienvenido a la Tacita. Les saludamos los gaditanos”. Y la vecina de éste, más gaditana aún y que lleva a el Alemania entre las piernas y al Cádiz CF y al Nazareno en sus pechos, lleva bajo las bragas “bienvenido a la república independiente de aquí tienes tu casa”. ¡Ole! Popurrí armonioso y bien cantado por estos duendes que “hacen que tus malos momentos de mueran de sed”.
Sin previo aviso; Los del Paraíso
Un cuarteto como Dios manda es este de Miguel Ángel Real y que traen a las tablas a un Dios en el paro tras terminar la Creación; un Adán de cuya costilla salió una Eva tan peluda que alguien gritó desde el Paraíso: “Dios, crea una Silk epil” y una serpiente amarilla y azul, que “se va lejos para salirse del pellejo”. Rompen el teatro con su estribillo: “Vaya putada nos hizo Dios al echarnos del Paraíso. ¿En dónde me meto yo con lo caros que están los pisos?”. En este Paraíso donde la única fruta prohibida es el nabo, al ser el Edén, “al que no le guste, que le den”. En resumidas cuentas, un cuarteto por la gracia de Dios.
La Pensadora gaditana
Uno de los platos fuertes del día fue la comparsa de Joaquín Quiñones, con el tipo de un periódico que lleva por nombre La Pensadora Gaditana, cuya redacción y talleres se hallan en el Gran Teatro Falla. Pasodoble enorme a la madre, “esa mujer que tocaste na más naciste, ese angelito que te tuvo dentro, bien guardadito, como en un templo (...).ella es la paz y la calma que riegan tus sienes y es el vacío en el alma cuando no la tienes, la razón para los abrazos, la quenunca te deja y siempre te viene”. Ole. Segundo de bofetada a la alcaldesa de Jerez. Popurrí de impresión y abrecartas que pone a la gente de pie para despedirles para hacer que no se pare esta rotativa de pasodobles.
Cuadro flamenco Al pan, pan y albino, vino
Tras el descanso hace su aparición estachirigota portorrealeña, con letras de José Manuel Martínez y música de Pedro Campos y que representan a un cuadro flamenco formado por doce gitanos albinos, “como Diego, el Cigala, pero metío en lejía”. Cuplé de bastinazo dedicado al alarga penes, “de tanto estirarme el pellejo, se me quedó el ombligo pegado al riñón”. ¡Ejem! Buenas sensaciones transmitieron estos flamenquitos que no temen ni a Bin Laden ni a sus misiles, ni a que suba el Euribor, sólo temen es a coger una insolación.
Los comparsistas se la dan de artistas
La comparsa de Juan Carlos Aragón es este año más juancarlista que nunca, y su primer mandamiento de la ley del artista es que “los carnavales los aprendí en la calle”. Pasodoble de presentación y declaración de intenciones de aquel que transmite las mayores emociones a los gaditanos, “saco el corazón por la garganta y el alma fundida en las manos”. Segundo de guantazo al pregonero de 2008, “si me ofrecieran ser pregonero diría que no, no me fuera a traicionar mi odio”. Cuplé de lo en forma que se han puesto en este año de gloria deportiva nacional , “antes cuando venía mi mujer, me iba andando y ahora me voy corriendo”. Popurrí de artistas que todo lo aprendieron en la calle y que afirman que “más valiente es el que miente que el que calla”. Más de uno ha visto más autobiografía que parodia en lo cantado después de haber esperado algo más de unos que se la dan de artistas.
Los Bienparecíos
La chirigota de Cádiz actúa bajo el tipo de hermanos gemelos: dos negros, dos pijos, dos flamenquitos, dos cantantes de hip-hop, dos metrosexuales y dos indios, que “no mandan cojones, mandan dos pares de cojones”, es decir, “que son gaditanos y encima por duplicado”.
Los Partitura
Los hermanos Clavaín llegan con su comparsa a deleitar a la audiencia ya muy entrada la noche. Pasodoble al hijo que mataría a su padre por maltratar a su madre. Buen cuplé a la crisis, que únicamente se puede sobrellevar tirando de pluriempleo, “cómo estará la cosa que en la Moncloa hay uno que es presidente y es Zapatero”. Dicen adiós a la voz de míralo, míralo, los del do, re, mi, fa sol.
Los Repartidores de tortas
Cierra la sesión la chirigota local con letras de Julio González Vázquezy música de José Manuel Vallejo. Van de los auténticos Hombres de Paco, es decir la Policía Armada, los grises de mano derecha XXL para dar las tortas que anuncian.
